Mazda ha registrado unas ganancias netas de 81.557 millones de yenes (608 millones de euros al cambio actual) en su año fiscal que abarca desde abril de 2021 a marzo de 2022, frente a los 31.651 millones de yenes (236 millones de euros) que perdió el año anterior.
Según ha informado la compañía, a pesar de la «severidad» del entorno empresarial, los resultados han avanzado «en cierta medida» en el fortalecimiento de la estructura de gestión y en recuperar el poder para generar ganancias.
En concreto, la marca japonesa facturó 3,12 billones de yenes (23.292 millones de euros) durante el ejercicio fiscal, lo que supone un 8,3% más, aunque sus ventas mundiales cayeron un 3%, hasta 1,25 millones de unidades.
Por su parte, el beneficio operativo de la empresa se quedó en los 104.227 millones de yenes (778 millones de euros), un 1.081% más, mientras que su beneficio ordinario fue de 123.525 millones de yenes (922 millones de euros), un 337% más.
Asimismo, la compañía planea repartir un dividendo de 20 yenes (0,14 euros) por acción con cargo a los resultados del ejercicio fiscal.
De cara al actual año fiscal, Mazda espera obtener un beneficio neto de 80.000 millones de yenes (597 millones de euros), lo que supondría una disminución del 2%. Aunque sus ingresos subirán un 22%, hasta los 3,8 billones de yenes (28.368 millones de euros).