La empresa de alquiler de vehículos Enterprise Rent A Car ha designado a Vincent Labella como nuevo vicepresidente y director general de la compañía en España, según anunció el grupo en un comunicado de prensa.
Labella, según especificó la empresa, «supervisará un importante programa de inversiones para mejorar la red de sucursales para ofrecer un mejor soporte a los clientes de negocios y seguros y el desarrollo continuo» de las tres marcas de la multinacional: Enterprise Rent-A-Car, National Car Rental y Alamo Rent A Car».
«Esta es una oportunidad increíble para hacer crecer las marcas en España. El negocio cuenta con un excelente equipo líder y una estrategia clara para apoyar las necesidades de movilidad de los clientes corporativos, de sustitución y minoristas», afirmó el ejecutivo.
El nuevo director general, que lleva ligado a Enterprise desde 2001, llega a España tras dirigir la firma en Detroit y sustituye en el puesto a Karsten Summers, que desde junio pasado ejerce como consultor en Los Ángeles (Estados Unidos).
De la mano de uno de los principales ejecutivos del grupo hoy retirado, Jim Burrell, Summers capitaneó la entrada de Enterprise en el mercado español tras la adquisición de las rent a car Atesa y Cíter a PSA Peugeot Citroën en 2011.
Ese año y esa compra de activos supuso la irrupción de Enterprise, la primera compañía mundial de alquiler de vehículos, en el continente europeo con la idea de convertirse en líderes del alquiler de coches en la región.
Desde 2012, cuando Enterprise Atesa inició su actividad formalmente su actividad en nuestro país, la empresa ha ido consolidando su presencia paso a paso hasta hoy, en la que ya utiliza, por ejemplo, únicamente su logo identificativo global, Enterprise.
La demanda de Enterprise contra AENA
Karsten Summers, además de impulsar el desarrollo inicial de Enterprise en España, fue igualmente el valedor de una denuncia de la alquiladora contra el gestor público de aeropuertos AENA en abril de 2016, después de que el operador sacara a concurso 218 licencias de espacios para alquilar vehículos nuevas en 39 aeropuertos, y “por supuestas prácticas restrictivas de la competencia».
Enterprise entendió que existía «un posible abuso de posición de dominio» en la fijación de las condiciones «para la Contratación de Arrendamiento de superficies destinadas a la explotación de la actividad de alquiler de vehículos sin conductor» en las zonas aeroportuarias bajo su jurisdicción.
En concreto, denunció que la renta mensual fija de AENA se incrementaba en la nueva licitación de espacios de arrendamiento de vehículos expresada en enero de 2016 en un 50%, y la variable en un 78%, lo que suponía pasar de pagar el 4,5% de la facturación mensual al 8%».
La compañía trató de que el nuevo proceso de licitación de espacios aeroportuarios para el arrendamiento de vehículos quedara en suspenso y que se mantuvieran las condiciones fijadas antes de enero de 2016, pero a finales de abril pasado, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia archivó las actuaciones y rechazó la incoación del procedimiento sancionador.