La compañía de soluciones de carga para vehículos eléctricos Wallbox registró un Ebitda negativo ajustado de 21,8 millones de euros durante el tercer trimestre del ejercicio actual, lo que representa un incremento del 31,4% en relación con los números rojos de 16,58 millones que reportó en el mismo periodo de 2023, de acuerdo con los últimos resultados financieros publicados por la compañía con sede en Barcelona.
Los resultados trimestrales de Wallbox se traducen en unas pérdidas operativas acumuladas en el periodo enero-septiembre de 44,3 millones de euros, según cifras de la empresa obtenidas por esta publicación.
En este sentido, las operaciones de la multinacional no han conseguido aún ser rentables, después de registrar 112 millones de euros de pérdidas netas durante 2023, lo que supuso un aumento del 78% en comparación con los números rojos de 62,8 millones que obtuvo en el año anterior, 2022.
“Nuestros resultados del tercer trimestre no han sido como esperábamos”, ha asegurado Luis Boada, el responsable financiero de Wallbox, en un encuentro con analistas de mercado.
No obstante, los ingresos de la compañía continúan una senda alcista, y en el tercer trimestre de este año alcanzaron los 34,7 millones de euros, con un aumento del 7% que Wallbox ha atribuido, de modo fundamental, al aumento de las operaciones en Norteamérica.
La facturación crece un 26% hasta septiembre
En los nueve primeros meses del año, la facturación de la empresa ha aumentado un 26%, hasta 126,6 millones de euros, lo que presagia que al final del ejercicio batirá su récord de ingresos, después de que ingresara un total de 143,7 millones de euros en 2023 y una cifra ligeramente superior en 2022, con 144,1 millones de euros.
El grupo dirigido por Enric Asunción prevé situar sus ingresos del cuarto trimestre en una horquilla de entre 40 y 45 millones y prevé unas pérdidas operativas de entre siete y 10 millones de euros.
“Está claro que el mercado actual de vehículos eléctricos es volátil y que esto está repercutiendo en nuestros resultados”, ha afirmado el primer ejecutivo de Wallbox, que ha señalado que “estamos ajustando la estructura organizativa hacia un modelo basado en unidades de negocio con el fin de alinear mejor los recursos con nuestra cartera de productos, mejorar la visibilidad del crecimiento en los ingresos, identificar oportunidades para ampliar los márgenes y seguir impulsando las ventas”.
En relación con los productos comercializados por la empresa en el tercer trimestre, Wallbox ha asegurado que obtuvo 23,7 millones de euros por medio de la venta de cargadores de pared de corriente alterna, que representaron el 68% de su facturación, mientras que vendió postes de carga de corriente continua por valor de 4,4 millones (13% de cuota) y servicios de software por 6,6 millones, con un 19% de cuota.
La firma, que al finalizar el tercer trimestre contaba con 71 millones de euros en caja a través de liquidez y herramientas financieras, mantiene su deuda a largo plazo en 84 millones de euros.
La empresa ha vendido ya más de un millón de cargadores en los cien países en los que opera en la actualidad.