La compañía automovilística Renault ha incorporado en la quinta generación del compacto Clio una versión especial enfocada en empresas denominada ‘business’ que se ofrece a los clientes con un motor diésel de 85CV, según indicó la compañía en la presentación dinámica de este popular modelo a los medios de comunicación en Zamora.
El mercado diésel, aunque se mantiene en franco declive en el mercado comercial de automoción español, es absolutamente clave para los resultados de las marcas y, especialmente, en los departamentos de Flotas y Empresas, dada la eficiencia y los bajos costes de consumo y mantenimiento de este tipo de propulsores.
En el caso del Clio, este dato concreto es muy revelador. Desde 2016 y hasta agosto pasado, esto es, en los últimos tres años y medio, Renault ha comercializado en España 28.295 unidades del Clio en ‘Real Fleet’, que suma las compras directas de coches que efectúan las empresas más el renting de las compañías. De esta cantidad, un 83%, más de ocho de cada 10 Clio que se venden, llevan mecánica diésel. En el caso concreto del renting, un 88,5% de las ventas del Clio son diésel, y un 71% se corresponden con adquisiciones puras de motorizaciones de gasóleo por parte de las empresas.
Para la marca del rombo, la llegada del nuevo Clio de quinta generación es crucial en un mercado de flotas en el que este modelo presume de ser el segundo más vendido desde 2016 en ‘Real Fleet’, el sexto si se tienen en cuenta solo las compras de empresas y el tercero mediante la fórmula de renting.
Con más de 15 millones de unidades vendidas en sus 30 años de historia, el nuevo Clio mide 4,05 metros de largo y casi 1,5 metros de ancho. Es un automóvil compacto muy fácil de conducir y, lo que más nos ha gustado en una primera impresión conduciéndolo, es el salto de calidad que ha experimentado en su interior.
Uno se sienta en el Clio y observa una calidad de materiales y una sencillez de líneas precisamente muy en la línea de los gustos profesionales, amantes de los elementos prácticos que tienen sentido. El habitáculo y cómo está resuelto es, a nuestro juicio, el gran punto fuerte de esta generación.
Además de ello, cabe destacar con fuerza que este vehículo cuenta con el maletero más grande de su segmento y respecto de sus rivales, con un total de 391 litros de capacidad disponibles, a los que se pueden sumar 26 litros adicionales esparcidos en el habitáculo. Tratándose, como se trata de una opción vehicular muy engarzada con el canal de flotas, el espacio disponible siempre supone una baza primordial.
Otra de sus buenas bazas es que, en el ámbito de la seguridad y desde la opción de acceso del modelo, esto es, en todas sus configuraciones, se aportan elementos de seguridad de serie como el reconocimiento de señales de tráfico, el indicador de distancia de seguridad, asistente de mantenimiento de carril y el frenado de emergencia con detector de peatones.
El Renault Clio dispone, en su edición para clientes corporativos ‘Business’, un equipamiento interesante: unas comedidas llantas de 16 pulgadas, retrovisores eléctricos, climatizador, asistente para el estacionamiento trasero, bluetooth y dos tomas USB y multimedia Easy Link de siete pulgadas válido para Android y Apple.
Un apunte que les queremos indicar al respecto: el pack de navegación apenas cuesta 248 euros. Merece la pena que lo incluya en su decisión de flota, porque facilitará mucho la vida a los empleados y no supondrá más allá de unos céntimos en la cuota mensual.
En relación con este último punto, una cuota de renting para el Renault Clio y teniendo en cuenta una utilización de 30.000 kilómetros anuales con un contrato de 48 meses, sin aportación de entrada y sin impuestos se puede encontrar por unos 325 euros en el mercado, incluyendo neumáticos, seguro, tarjeta de combustible, mantenimiento y atención permanente.
Del Clio se han vendido en nuestro país más de 1,1 millones desde su lanzamiento inicial en 1990 y tras el paso de cuatro generaciones diferentes. Con la quinta, la actual, se mostrará por vez primera una opción híbrida que estará disponible en el mercado a partir del primer trimestre del próximo ejercicio.
El Clio híbrido se construirá a partir de la base de conocimiento adquirido con el modelo ZOE —completamente eléctrico—. Según ha avanzado la marca, dispondrá de un arranque “cien por cien” en eléctrico y funcionará con un propulsor 1.6 de gasolina a lo que se sumarán dos motores eléctricos de apoyo. Dispondrá de frenos regenerativos y permitirá un ahorro de combustible en ciudad de hasta el 40% en relación con la versión convencional.
Asimismo, de acuerdo con Renault, el Clio híbrido posibilitará hasta un 80% de conducción en modo completamente eléctrico en ciclo urbano.