La Comisión Europea ha instado este martes a Volkswagen a indemnizar a todos los consumidores europeos —no solo a los alemanes— que fueron engañados por el dieselgate, al comprar a la marca vehículos diésel con un sistema instalado que falseaba los niveles de emisiones contaminantes.
«Hace seis años desde que estalló el dieselgate y no todos los consumidores han sido indemnizados. Ha habido sentencias que muestran el trato injusto a los consumidores de parte de Volkswagen, que no quiere trabajar con las organizaciones de consumidores para hallar soluciones adecuadas», se ha quejado el comisario de Justicia, Didier Reynders.
En un comunicado firmado junto con la Red de Centros Europeos de Consumidores, Reynders se dirige al grupo automovilístico para recordarle que «no solo los residentes en Alemania deben ser compensados (por el fraude)». El comisario ya intentó el pasado año presionar a la compañía con una carta formal llamando a compensar a los clientes víctimas del fraude.
El fabricante alemán no ve necesario compensar de manera voluntaria a los consumidores europeos que adquirieron sus coches fuera de Alemania porque, defiende Volkswagen, los vehículos trucados han sido modificados para cumplir con los requisitos legales en la Unión Europea.
Bruselas, sin embargo, lamenta que la compañía se resista a indemnizar a todos los europeos víctimas del fraude por igual y ello a pesar de que varios tribunales nacionales han ordenado a Volkswagen indemnizar a sus clientes y que el propio Tribunal de Justicia de la UE avaló que se recurriera a los tribunales nacionales para reclamar en este caso.
El Ejecutivo comunitario y las autoridades europeas en materia de consumo consideran que con esta estrategia Volkswagen está contraviniendo las normas comunes en materia de protección del consumidor, por ejemplo en la publicidad de vehículos diésel equipados con sistemas ilegales.