Trabajé nueve años en Atesa [hoy Enterprise] y, posteriormente, 29 años en Europcar. He cumplido cinco años al frente de Feneval (Federación Nacional Empresarial de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor). El año pasado fue muy especial, estoy muy satisfecho. Se produjo un récord histórico de matriculaciones de automóviles de alquiler en España. Pero lo estoy más aún de que, después de 25 años de negociaciones, hayamos conseguido que los coches de alquiler pasen la ITV cada cuatro años, en lugar de cada dos, como hasta ahora.
Era un gran problema para nosotros, un sinsentido. Ha sido un alegrón y, además, se ha demostrado que teníamos razón. La medida se traducirá en menos costes directos e indirectos para las empresas de alquiler de vehículos.
No somos pocos. El rent a car es un sector muy atomizado, con más de 2.000 compañías. Eso sí, las cinco primeras generan el 55% de la facturación del sector y las 15 primeras, más del 80% 9 También se caracteriza por la transmisión de empresas de padres a hijos, es un negocio muy familiar.
¿Tensiones geopolíticas? Sí, han beneficiado a España para atraer más turistas y alquileres de coches, es así. Aunque 2017 ha sido un año muy bueno en matriculaciones, todavía no tengo claro lo que ocurrirá este ejercicio. Puede que la cifra se mantenga o tienda a reducirse algo por el exceso de oferta ante los grandes picos de demanda.
Las tasas ecológicas y medioambientales que se nos vienen encima son otro de nuestros grandes caballos de batalla frente a las Administraciones Central y Autonómica en 2018. Puede que suframos este año en ese aspecto, sí.
Hay otra gran ilusión que tengo, un proyecto en el que llevamos trabajando 15 años y que todavía no ha fructificado: telematizar los registros de las alquiladoras de vehículos. Estamos trabajando con fuerza y energía en ello junto con La Dirección General de la Policía… Es un proceso complejo y tecnológico, pero está bien encaminado.