El fabricante de automóviles Seat quiere convertirse en la referencia corporativa con sistemas de propulsión eficientes y para ello está lanzado a liderar una ofensiva total para cubrir su oferta de producto con propulsores de gas natural comprimido (GNC), cuya autonomía óptima puede bordear los 1.200 kilómetros con el depósito de gasolina y los dos de gas.
“Hay un viento de cola evidente para este tipo de propuestas, y en el segmento de las flotas el GNC es una alternativa muy, pero que muy real”, asegura Antonio Calvo, director de Movilidad Sostenible de Seat España, que durante el último mes se ha recorrido media España para mostrar a potenciales clientes el nuevo Ibiza 1.0 TGI, el popular superventas de la marca con tecnología híbrida de gasolina y gas natural comprimido.
[su_youtube url=»https://www.youtube.com/watch?v=_RhDrQJ4CCI»]
De acuerdo con Seat, en este momento no existe en el planeta un modelo que cumpla con las especificaciones del Ibiza TGI, un automóvil que se fabrica en la factoría española de Seat en Martorell (Barcelona) y que dispone de dos depósitos de gas adicionales al de gasolina de 13 kilogramos de peso cada uno.
Repostar el Seat Ibiza TGI es igual de sencillo que hacerlo con un coche diésel o de gasolina. FOTOGRAFÍA: SEAT
Seat Ibiza TGI: Un coste de uso y mantenimiento muy bajo
Con las mismas prestaciones que su homólogo de gasolina, pero con muchísima más autonomía, hemos probado en directo esta versión del Ibiza y damos fe de sus enormes posibilidades. Su coste de uso es, sencillamente, ridículo. En términos porcentuales, la diferencia de coste por cada cien kilómetros recorridos es de un 46% en el caso del gas respecto de la gasolina y del 31% si se compara con un mismo motor diésel.
“¿Cuál es la avería más frecuente de este coche?” —Recordaba Fernando Salvador, director de Comunicación de Seat España, durante la presentación del modelo ante los medios de comunicación. —“La avería más común es que se pudra, literalmente, la gasolina del depósito y tengamos que cambiarla porque no la utilicemos. La autonomía del gas es tremenda”, apostillaba.
Aunque no se puede medir de igual manera el consumo de kilogramos de gas por cada cien kilómetros y respecto de los litros de gasolina por cada centena de kilómetros, Seat calcula que con un precio medio (habitual) de 0,975 euros/kg, bastan 12,67 euros para llenar el depósito del Ibiza TGI. Eso significa que recorrer cien kilómetros cuesta 3,2 euros en un Ibiza TGI, por los 4,64 euros que costaría un diésel, los 5,9 euros de un gasolina, los 4,13 euros de un híbrido y los 3,84 euros de un GLP equivalentes.
Esos 12,67 euros serán suficientes, de acuerdo con la marca, para que el Ibiza TGI recorra casi 400 kilómetros, comparados con los 214 kilómetros de la gasolina, los 271 kilómetros del diésel los 305 kilómetros de un híbrido o 327 kilómetros en el caso de un coche con GLP.
Gas natural: Hasta 100 euros menos de TCO
“Si existiera un número mayor de gasineras [estaciones de servicio para repostar gas], directamente no habría cuestión, no hablaríamos de ello, porque el TCO [Coste Total de Adquisición] del vehículo de gas es sensiblemente inferior al de uno con motor convencional. estaríamos hablando de hasta cien euros menos de TCO unitario”, considera Antonio Calvo.
Como automóvil de última milla en las grandes ciudades, además, es también una interesante opción por cuanto su condición de híbrido le permite circular por las almendras de las urbes durante las jornadas con episodios de alta contaminación.
En relación con la infraestructura mencionada por Antonio Calvo, en la actualidad existen en España un total de 57 estaciones de gas natural operativas y se prevé la próxima apertura de otras 34, para rozar la centena.
“El cliente de flotas cada vez va a tener más en consideración esta alternativa, porque además de que no hay rival en términos de consumo, igualmente añade un muy buen componente de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) a las compañías, independientemente de su tamaño. El gas es una opción muy eficiente y muy amistosa con el medio ambiente”, apunta el responsable de Movilidad Sostenible de Seat.
Seat está incrementando cada vez más su presencia en el mercado de las propuestas tecnológicas alternativas, y con el GNC ya está obteniendo respuestas muy positivas. Por ejemplo, la versión de gas natural de otro de sus modelos más vendidos, el León, sumó una de cada 10 de sus ventas en el último trimestre del año pasado en nuestro país.
La marca ha dispuesto un ambicioso objetivo para su gama de GNC —Ibiza, León, León ST, Mii y Arona, próximamente este último—, que pasa porque sus entregas supongan un 5% del total de la compañía en España en 2018, lo que supondrían varios miles de unidades.