El fabricante de baterías eléctricas Northvolt ha anunciado que se plantea iniciar un proceso de despidos en su plantilla y detener parte de su producción ante la lentificación en la venta de vehículos eléctricos en el continente europeo.
La empresa sueca suspenderá, en concreto, la fabricación de un elemento clave en la producción de las baterías de litio que se utilizan para montar en vehículos eléctricos, lo que en la práctica, además, supondrá que tendrá que importar este tipo de componente.
En este sentido, Northvolt ha señalado que planea aplicar despidos en su gigafactoría de Suecia, y que revisará de modo estratégico su plan de crecimiento, después de que en julio pasado ya anunciara un replanteamiento de su modelo de negocio.
La propia compañía ha explicado en un comunicado que está negociando los recortes de personal con los sindicatos.
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Recientemente, Northvolt perdió un pedido de baterías de elevado tamaño por parte del grupo BMW. Además, la compañía anunció la venta de unos terrenos industriales en Borlänge, donde dispone de su factoría principal, que teóricamente estaban dispuestos para expandir su capacidad de fabricación de baterías eléctricas, con una previsión de generar mil empleos.
En el último ejercicio, Northvolt ha tenido que anunciar que suspende su propósito de crear nuevas factorías de baterías en regiones como Canadá y Alemania.
Además, la empresa bordeó los mil millones de euros de pérdidas en 2023, lo que supuso triplicar las pérdidas cosechadas en 2022.