Las previsiones del sector automovilístico global apuntan a un crecimiento del 2% en el mercado mundial del automóvil en 2025 que será impulsado principalmente por China, con una expansión del 4%, y por Estados Unidos, que registrará un avance del 2%, de acuerdo con un informe de Allianz Trade citado por la firma de seguros de crédito Solunion.
En Europa, según el informe, el crecimiento será más moderado, con un incremento estimado del 1,5%, «condicionado por la incertidumbre derivada de las tensiones arancelarias y el impacto en las exportaciones, particularmente en Alemania».
En el mercado español, por su parte, la tendencia de crecimiento de 2024 —alza del 7,1%— se mantendrá en 2025, con una previsión de incremento superior al 2,5%.
No obstante, el sector productivo muestra «signos de estancamiento», detalla Allianz Trade.
España, que en 2024 registró un aumento del 0,6% en la fabricación de turismos respecto del año anterior, no prevé un repunte significativo en este apartado en 2025.
«Con 16 plantas en funcionamiento, el país se posiciona como el noveno mayor productor mundial y el segundo en Europa, en un sector que representa el 10% del PIB nacional», refleja el informe.
Vehículo eléctrico y competitividad europea
En relación con el mercado de vehículos eléctricos, este mantiene una dinámica «divergente» según la región, con China liderando la transición con un crecimiento del 40% en las ventas en 2024, mientras que las matriculaciones de vehículos de combustión interna han caído un 17%.
Allianz Trade proyecta una recuperación del segmento de vehículos eléctricos en 2025, impulsado por el endurecimiento de la regulación medioambiental y la necesidad de los fabricantes de reducir su huella de carbono para evitar sanciones regulatorias.

Por lo que respecta al espectro de la competitividad, el estudio identifica también «tres riesgos estructurales que amenazan la competitividad de la industria automovilística europea».
Al respecto y en primer lugar, la presión competitiva de los fabricantes chinos, «cuyos modelos continúan siendo entre un 10% y un 15% más económicos que sus equivalentes europeos». Esto sucede incluso tras la imposición de aranceles en el último trimestre de 2024, detalla Allianz Trade.
En segundo lugar como factor de riesgo, la «elevada dependencia de China en el suministro de baterías», dado que el país asiático domina aproximadamente dos tercios del mercado global, lo que otorga a los fabricantes chinos «una ventaja competitiva en la oferta de vehículos eléctricos con precios más bajos y tecnología avanzada».
Por último, el marco regulador en la Unión Europea «impone nuevos retos a la industria con la implementación de objetivos más estrictos en materia de emisiones de dióxido de carbono, lo que podría traducirse en «sanciones para los fabricantes en un contexto de incremento en los costes energéticos y mayor presión sobre la rentabilidad operativa».
Para recuperar su competitividad y mitigar estos riesgos, el estudio propone que la industria automovilística europea reoriente su estrategia a través de «un incremento en la inversión en Investigación y Desarrollo, diversificación geográfica de mercados y un refuerzo de la cooperación intersectorial».