La Autoridad de Conducta Financiera (FCA) británico, el equivalente a la CNMV española, ha presentado un plan de compensación sectorial que podría alcanzar los 11.000 millones de euros e implicar a unos 14 millones de contratos de financiación de vehículos con comisiones ocultas firmados en Reino Unido entre abril de 2007 y noviembre de 2024.
El esquema propuesta inicialmente por FCA contempla unas devoluciones medias de 820 euros por cliente y busca reparar el perjuicio derivado de la omisión de información sobre las comisiones en los acuerdos entre las entidades prestatarias y los concesionarios de automóviles.
El regulador ha estimado que el importe total de las devoluciones rondará los 8.200 millones de libras, equivalentes a unos 9.600 millones de euros, a los que se sumarán unos 1.400 millones en costes operativos y de administración.
Esta medida surge después de que se consolidase una sentencia firme del Tribunal Supremo británico del pasado 1 de agosto, que declaró ilegales varios acuerdos de créditos en los que las entidades financieras aplicaban una serie de comisiones elevadas sin informar al cliente final.

Alcance del plan y aplicación temporal
El mecanismo propuesto por FCA cubrirá los contratos de financiación de automóviles suscritos en los últimos 17 años y establecerá un procedimiento único de compensación para los consumidores afectados.
Los prestamistas deberán identificar a los clientes incluidos en el esquema y tramitar de forma automática las compensaciones, salvo que el usuario decida excluirse expresamente.
Los consumidores no necesitarán recurrir a abogados ni a empresas de gestión de reclamaciones para recibir el pago, ya que el plan incorpora un modelo de inclusión automática.
El regulador ha indicado al respecto que publicará un manual operativo con los pasos que las entidades deberán seguir para aplicar la compensación y verificará su cumplimiento mediante auditorías internas y externas.

Renting y leasing también están incluidos
FCA ha especificado de modo claro en su propuesta general que los acuerdos de leasing y de renting también están afectados por esta situación, si bien mantendrán un calendario propio, con un plazo de presentación de reclamaciones por parte de los usuarios potencialmente afectados hasta diciembre de este año.
El regulador ha asegurado que el mercado británico de financiación de automóviles “sigue funcionando de manera ordenada”, aunque ha reconocido que algunas entidades con mayor exposición al segmento de riesgo podrían experimentar un impacto «relevante».










