El fabricante de coches estadounidense Ford, uno de los afectados por la huelga convocada por el sindicato United Auto Workers (UAW) desde el pasado 15 de septiembre, ha enviado una propuesta «récord» a UAW para llegar a un acuerdo laboral marco hasta el 30 de abril de 2028 sobre los 57.000 trabajadores de la compañía representados por el sindicato.
Según ha explicado Ford, es la oferta más contundente que ha hecho sobre cuestiones económicas desde el pasado 29 de agosto, con la que la compañía incluye «mejoras sin precedentes» para los 57.000 trabajadores representados por UAW, colocándolos entre «el 25% más alto» de todos los empleos estadounidenses en horas y sueldo.
Además, fija el reparto de beneficios para todos los trabajadores (incluidos los temporales), seguridad laboral y de producto para cada fábrica de la UAW, mientras que preserva la capacidad de la compañía para invertir y crecer.
El presidente y consejero delegado de Ford Motor Company, Jim Farley, ha asegurado que «la fuerza laboral de UAW» sustentó a la compañía durante la pandemia, al tiempo que tanto estos trabajadores como sus familias se han visto afectados duramente por los efectos de la inflación. Por ello, Farley quiere asegurarse de que los trabajadores salgan de las negociaciones con dos cosas: «un contrato récord y un futuro sólido».
«Hemos puesto sobre la mesa una oferta que será costosa para la empresa, especialmente dada nuestra gran presencia en Estados Unidos y nuestra fuerza laboral con UAW, pero que creemos que aún permite a Ford invertir en el futuro», ha destacado el consejero delegado de la compañía.
Sobre las plantas de baterías, la compañía ha remarcado la «línea dura» que ha adoptado el sindicato, al tiempo que ha asegurado que siguen abiertos a trabajar con la UAW en las futuras plantas de baterías de Estados Unidos. Sin embargo, han asegurado que estas plantas deben operar a niveles competitivos y sostenibles, ya que conllevan inversiones multimillonarias.
En este sentido, Ford ha apuntado que tres de las cuatro plantas de baterías en construcción forman parte de BlueOval SK, una joint venture entre Ford y SK On. Además, la mano de obra para estas operaciones no ha sido contratada, por lo que los futuros empleados para estos trabajos pueden elegir si estar representados por el sindicato.
Por ello, Ford ha querido dejar claro que ninguno de sus empleados, incluidos los de sistemas de propulsión, van a perder su trabajo debido a las plantas de baterías durante este período.