El comité ejecutivo fabricante de automóviles Nissan ha aprobado la venta de todas sus operaciones en Rusia a NAMI, el Instituto Central de Investigación y Desarrollo de Automóviles y Motores, señalando así su inminente salida de este mercado, que le costará a la marca japonesa unos 100.000 millones de yenes (unos 706,9 millones de euros al cambio actual).
Así, con la venta se transferirán todas las operaciones de Nissan en Rusia, Nissan Manufacturing Russia (NMGR), a NAMI para futuros proyectos de vehículos de pasajeros. Esto incluye las instalaciones de fabricación e I+D de Nissan en San Petersburgo, y el centro de ventas y marketing en Moscú, que operará bajo un nuevo nombre. Todos los empleados de Nissan en el mercado recibirán una protección laboral de doce meses.
Pese a este impacto en las cuentas, Nissan mantendrá sus previsiones para todo el año. Los términos de la venta permitirán a Nissan la opción de recomprar la entidad y sus operaciones en los próximos seis años. La compañía espera que la venta se formalice en las próximas semanas tras la aprobación de las autoridades pertinentes.
«En nombre de Nissan, agradezco a nuestros colegas rusos su contribución al negocio durante muchos años. Aunque no podemos seguir operando en el mercado, hemos encontrado la mejor solución posible para apoyar a nuestra gente», ha declarado el presidente y consejero delegado de Nissan, Makoto Uchida.