Más de ocho de cada 10 empresas españolas utiliza ya o considera usar vehículos de ocasión en régimen de renting en los próximos tres años, de acuerdo con una de las conclusiones obtenidas por el Observatorio de Movilidad de la empresa de renting Arval, que acaba de presentar la edición correspondiente a 2024 de este indicador de movilidad corporativa.
“Existe un stock elevado de automóviles de segunda mano y España, por así decirlo, se ha lanzado a este tipo de vehículos, que en el caso del renting tienen dos o tres años de antigüedad y están perfectamente mantenidos, además de ser más económicos en cuota”, ha asegurado Omar Sánchez, director del Arval Mobility Observatory, en un encuentro con medios de comunicación.
El directivo ha indicado que este tipo de vehículos se están adoptando por parte de las empresas, y de modo principal, como herramienta de movilidad compartida en el ámbito profesional, para compartir trayectos in itínere o desplazamientos puntuales de carácter laboral.
Hay que decir al respecto que, según las cifras de Arval, recabadas en cerca de 9.000 entrevistas a profesionales con decisión sobre flotas de empresas, un 35% de los preguntados ha señalado que ya utiliza habitualmente el renting de usados, mientras que un 47% lo considera de modo abierto como una opción que elegirá en los próximos tres años.
El dato es similar al promedio de la Unión Europea, que expresa un 41% de usuarios que optan ya por el usado de renting, en tanto que un 42% sopesa tirar de esta fórmula de aquí a 2026.
En cuanto a las expectativas de uso del renting de ocasión por parte de los diferentes tipos de empresas, son las de mayor tamaño —de 500 o más empleados— las que prevé utilizar más este tipo de solución de movilidad en los tres próximos años, con un 51%, mientras que ya la utiliza el 37%.
En el caso de las empresas de 100 a 499 empleados, el 43% utiliza habitualmente esta fórmula y el 44% considera que lo hará, y en el caso de las pymes puras, de entre 10 y 99 empleados, reflejan el uso más reducido, con un 22%, pero su expectativa de uso de renting de usados es la mayor, con un 52%.
Las empresas de hasta 10 empleados, de su lado, utilizan un renting de usado en un 37% y creen que lo utilizarán de aquí a 2026 en un 79%.
El renting de usados, crucial para el V.O.
El mercado de vehículos de ocasión mantiene un idilio con los consumidores españoles que se ha trasladado también al universo corporativo, especialmente en la franja de vehículos más jóvenes y por causa fundamental, aunque existan más razones, del encarecimiento progresivo en el precio del vehículo nuevo desde la pandemia, un aspecto que también ha incidido en las cuotas de renting.
Se prevé que al final de este ejercicio se hayan efectuado en España más de dos millones de transferencias de automóviles de segunda mano —2,083 millones—, según cifras de la asociación Ganvam elaboradas por la consultora MSI.
Este dato supondrá un crecimiento del 7% en comparación con las cifras de ventas de usados de 2023 y consolidar a España como el quinto país de Europa por volumen, por debajo de Italia, con 5,23 millones de unidades esperadas en 2024, Francia, con 5,6 millones, Alemania, con 6,66 millones y Reino Unido, con 7,81 millones de usados comercializados.
Aunque el mayor grueso del volumen de transferencias de usados en España se efectúa entre clientes particulares, con 1,35 millones de unidades esperadas para este año, el mayor crecimiento y motor de arrastre de la comercialización de vehículos de segunda mano en nuestro país en 2024 provendrá, precisamente, del renting de automóviles, ya que MSI estima que se alcanzarán 169.061 ventas de usados en el canal de renting este año, lo que supondrá un incremento del 24,2% en comparación con las cifras de 2023.
El resto de los usados serán asumidos por los compraventas profesionales, con 298.285 unidades previstas, un 2,6% más, el sector de rent a car, con 146.671 unidades y las importaciones, con 112.000 unidades.
