La empresa tecnológica y proveedor internacional de automoción Continental ha logrado este año introducir en el mercado el primer eje de dirección eléctrico totalmente integrado. Y mantiene su apuesta por la conducción inteligente, al desarrollar un sistema de radar destinado a vehículos sin conductor, que ya utilizan los autobuses EZ10 de la empresa francesa EasyMile.
A su vez, Continental ha reforzado su compromiso con el medioambiente con la creación de una nueva tecnología para vehículos híbridos que permite por primera vez conducir grandes distancias solo con energía eléctrica. Todas estas innovaciones han sido presentadas bajo el lema “La movilidad es el corazón de la vida” en su TechShow 2019, evento que sirve como adelanto para el próximo Salón del Automóvil de Frankfurt (IAA) que tendrá lugar el próximo mes de septiembre.
Gracias a los más de 3.000 millones de euros en investigación y desarrollo que Continental invirtió en 2018, «estamos dando forma a la mayor revolución en la industria del automóvil desde su nacimiento y lo estamos haciendo desde una posición de liderazgo», ha afirmado Elmar Degenhart, director del Consejo Ejecutivo de Continental, quien ha añadido que «Mediante nuestra tecnología, pretendemos conseguir cero accidentes y cero emisiones».
Una parte de esta cantidad se ha destinado a tecnología con la que desarrollar nuevas funciones de a bordo. «Nuestros sistemas de conducción alternativos y tecnología para la conducción automatizada y autónoma, así como para el coche conectado, son los ingredientes clave para un ecosistema de movilidad saludable. Nuestro objetivo es desarrollar nuevas tecnologías que sean ambientalmente eficientes y socialmente aceptadas. De esta manera, pretendemos proteger no sólo el entorno ecológico, sino también el económico y el social», continúa Degenhart.