Bosch y Microsoft han anunciado el inicio de una colaboración para desarrollar aplicaciones de la inteligencia artificial (IA) generativa en los sistemas de seguridad en carretera de la conducción automatizada, según detallaron ambas compañías en un comunicado de prensa.
Las empresas señalan que la mayor expectativa respecto a la IA generativa es que permita a los vehículos evaluar situaciones y reaccionar en consecuencia y, de esta manera, proporcionar aún más seguridad a los usuarios de la carretera.
Ambas compañías explican que actualmente, «cuando se trata de entrenar sistemas para la conducción automatizada, la IA se topa con límites. Los sistemas actuales de asistencia al conductor pueden detectar personas, animales, objetos y vehículos, pero en un futuro próximo la IA generativa podría ayudar a determinar si una situación podría provocar un accidente». Esta herramienta utiliza grandes cantidades de datos para entrenar a los sistemas de conducción automatizada, permitiéndole extraer conclusiones mejoradas a partir de estos datos. Así, en un futuro podría deducir si un objeto en la carretera es una bolsa de plástico o una pieza dañada del vehículo, detallan.
Esta información también se puede utilizar para comunicárselo directamente al conductor mostrando, por ejemplo, una advertencia, o para iniciar maniobras de conducción adecuadas, como frenar encendiendo las luces de emergencia, añaden.
Bosch y Microsoft, por tanto, indican que se han asociado para desarrollar una plataforma de software universal que conecte continuamente los coches y la nube, y quieren trabajar juntos para identificar «nuevas oportunidades de aportar tecnología de IA a sus clientes y a la industria de los vehículos autónomos». “Es de gran valor el amplio conocimiento de Bosch sobre los vehículos, su experiencia en IA específica para automoción, así como su acceso a los datos de los sensores del vehículo para alimentar la IA generativa”, explican desde la empresa sobre este acuerdo.
Por otro lado, Bosch señala que así como se ha asociado con Microsoft para el desarrollo de la IA generativa en el ámbito de la conducción automatizada, la empresa trabaja con varios otros socios, como AWS, Google y Aleph Alpha.