El sector de distribución de vehículos español, alineado bajo la asociación Ganvam, ha solicitado a las Administraciones que coadyuven con apoyos públicos en la transición hacia un nuevo modelo de negocio digital a las empresas que se dedican a esta actividad, fundamentalmente pymes, con el punto de mira puesto en conseguir no perder hasta 70.000 puestos de trabajo en el cercano horizonte de 2030.
Así lo ha expresado en un encuentro con medios de comunicación el máximo responsable de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam), Raúl Palacios, quien ha alertado de que el modelo de distribución actual, tal y como está planteado, “se está muriendo”.
“Me preocupan las pymes de este sector y desde hace tiempo venimos diciendo que la digitalización supone un enorme cambio. Es una herramienta, que no lo es todo, pero ese cambio que hay que realizar en un momento en el que se puede hacer todo desde un móvil supone un cambio evidente y tenemos que hacernos valer como empresas independientes de los fabricantes y como sector en sí mismo”, ha destacado el ejecutivo.
García ha anotado que “digitalizar no es solo subir una oferta de un coche a la web, que no representa es un fin, es el medio y tiene que haber, y hay, mucho detrás con un nuevo tipo de cliente como el que tenemos”.
En este sentido, el ejecutivo ha afirmado que su objetivo es frenar la “uberización” de la distribución de automóviles, entendido como un sistema de economía de plataformas que “agrava ya” la relación entre la distribución y los fabricantes. “Es un peligro que todo el trasvase en el proceso que está sucediendo desde la compra del vehículo tradicional al pago por uso se haga sin contar con concesionarios y talleres”, ha apuntado.
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De acuerdo con un informe la consultora Roland Berger encargado por Ganvam, el sector de la distribución podría perder hasta 70.000 puestos de trabajo de aquí a 2030 si no se sabe adaptar a los nuevos procesos de digitalización, un entorno en el que la entidad reclama mucho más apoyo por parte del Ejecutivo que preside Pedro Sánchez.
“No queremos que nos pase como las tiendas de discos o los videoclubes y debemos luchar por ello”, ha constatado Raúl García, que ha contrapuesto la gran atención que se presta a lo que sucede en el entorno de los fabricantes de vehículos, en el plano industrial, en detrimento del sector de la distribución de vehículos.
“Nosotros damos trabajo a 350.000 personas, que es una cifra que quintuplica a el total de empleos actuales ligados a la fabricación. Y no se nos hace caso”, ha lamentado el directivo de la asociación.
García ha apelado a la valentía de las empresas que representa, conscientes de que “debemos cambiar el rol que tenemos, sabiendo lo difícil que es decirle a un empresario que lleva toda la vida cambiando coches de un modo que tiene que cambiar, que lo importante ahora son los “call centers”, anticiparse al cliente ofreciéndole mantenimientos y servicios o, incluso, marcando los patrones que definirán su próxima movilidad”.
“Y si no hacemos nosotros este cambio, vendrá alguien de fuera a realizarlo”, ha sentenciado.
Al respecto, Raúl García ha apuntado directamente a la Administración, indicando que si no reciben apoyo en este cambio, “muy probablemente ocurrirá”, en alusión a la pérdida de 70.000 puestos de trabajo en la distribución, un 20% del volumen actual.
Asimismo ha reseñado que el Perte de automoción recientemente aprobado por Bruselas, y que supondrá una inyección en forma de miles de millones a la automoción española, “se ha diseñado a medida de ciertos fabricantes de automóviles y se hace para que esta industria sea puntera, lo cual compartimos, pero es un error no ayudar a las empresas de distribución a que no consoliden el cambio que está experimentando el automóvil”.
