El fabricante SEAT participará hasta 2023 en el proyecto Life Landfill Biofuel, aprobado recientemente por la Comisión Europea, para la obtención de gas renovable a partir de los vertederos municipales.
El objetivo del proyecto es lograr una gestión más eficiente mediante la obtención de biometano de una fuente energética autóctona y abundante y cuenta con un presupuesto global de 4,6 millones de euros, de los cuales la Comisión Europea financia el 55%.
El responsable de los proyectos de gas renovable de SEAT, Andrew Shepherd, ha afirmado que «este proyecto nos permitirá avanzar en el desarrollo e investigación del biometano como combustible. Nuestro objetivo final es garantizar el impacto cero emisiones de CO2 en todo el ciclo de vida del vehículo».
Para la promoción de la economía circular, la eficiencia energética y la reducción de emisiones, SEAT ya participa en el proyecto Life Methamorphosis para conseguir biometano a partir de residuos previamente seleccionados y purines de una granja de Lérida. El nuevo proyecto Life Landfill Biofuel supone un paso más ya que la materia prima proviene directamente del vertedero, sin una separación previa.
La Unión Europea limitará al 10% los residuos municipales que se pueden tirar a los vertederos en 2035. Por ello, convertir los residuos en biocombustible para el transporte es una solución para este reto medioambiental. Este nuevo proyecto cuenta también con la participación de FCC, IVECO, la Universidad de Granada, la Fundación CARTIF, SYSADVANCE y Gasnam. Además, SEAT también desarrolló junto a Aqualia un proyecto similar para convertir aguas residuales en biocombustible.
En Europa hay casi medio millón de vertederos, por lo que el desarrollo y la investigación en los mecanismos de explotación en la obtención de biometano a partir de los residuos representa una oportunidad de negocio para convertir los residuos en una fuente de energía, que a su vez también contribuirá a disminuir las emisiones medioambientales.
Por ello, existe un gran potencial en la puesta en marcha de certificados de origen para la producción de biometano. Este sistema facilitaría el desarrollo de la industria en España, tal y como ya hacen otros países de la Unión Europea, y poder transferir estas certificaciones entre sectores abriría muchas posibilidades a la industria del transporte.