La Cámara Alta de Estados Unidos no podrá imponer al Servicio Postal (USPS) la venta forzosa de su flota de vehículos eléctricos y de la infraestructura de recarga instalada, después de que la parlamentaria del Senado Elizabeth MacDonough haya determinado que dicha medida «requiere de una mayoría cualificada de 60 votos», de acuerdo con una información publicada por la agencia Reuters recogida a través del Comité de Presupuestos de la institución norteaMericana.
El dictamen, emitido el domingo por la noche, impedirá de facto a los senadores republicanos avanzar en una enmienda incluida en una propuesta legislativa fiscal y presupuestaria que pretendía revertir parte del plan de electrificación de flota de la flota pública de Correos del país, USPS, aprobada en 2023.
Esta resolución se suma a una decisión anterior de la misma autoridad parlamentaria que desestimó el intento de bloquear los reglamentos que buscan reducir de forma sustancial las emisiones contaminantes del transporte y favorecer la venta de vehículos eléctricos.
Hay que recordar al respecto que la Administración Trump está siendo muy crítica con los procesos de electrificación del sector del automóvil.
El Servicio Postal estadounidense ha advertido de que la eliminación de sus vehículos eléctricos tendría un coste directo de 1.500 millones de dólares (unos 1.400 millones de euros al cambio actual), de los cualesmil millones corresponderían a la sustitución de los vehículos actuales y otros 500 millones al desmantelamiento de la infraestructura de recarga ya desplegada, lo que, en sus propias palabras, “dificultaría seriamente nuestra capacidad para renovar una flota de reparto obsoleta y envejecida”.
USPS cuenta en este momento con unos 7.200 vehículos eléctricos en circulación, de los que la práctica totalidad se corresponden con modelos Ford e-Transit y el resto a unidades fabricadas a medida por Oshkosh Defense.
Los legisladores republicanos también han intentado revertir parte de la financiación incluida en la Ley de Reducción de la Inflación (Inflation Act), aprobada en 2023, por medio de la petición de devolución de mil millones de dólares del total de 3.000 millones asignados al Servicio Postal para apoyar su electrificación, una partida que incluía 1.200 millones de dólares destinados exclusivamente a la adquisición de vehículos eléctricos.