La sostenibilidad se ha convertido en un valor clave para el sector de la movilidad. El respeto al medio ambiente y el fomento del ciclo de vida de los productos y servicios también ha llegado al mundo del motor, que cada día está más concienciado con el cuidado del planeta. El renting de vehículos ha lanzado su apuesta firme por la economía circular, un nuevo enfoque del modelo productivo y de consumo que aboga por el ahorro de forma óptima.
Dado su potencial en la oferta de servicios de movilidad, el renting ha avanzado considerablemente en el contexto de la economía verde. Los últimos acontecimientos acaecidos a nivel mundial, el tope al precio del gas, la crisis de semiconductores, y otras consecuencias derivadas de la guerra de Ucrania, han alertado de la necesidad de amplificar la sensibilidad ecológica en pro de la conservación de los recursos naturales.
Las medidas puestas en marcha por el sector del renting lo posicionan como líder de la transformación digital en la movilidad eficiente y sostenible. Alineada con las directrices de la Unión Europea, esta industria ha consolidado su implicación en la reducción de emisiones de CO2 y la electrificación de las flotas de vehículos. Estas actuaciones, que podrían parecer sencillas, reportan a grandes rasgos la garantía de un aire más limpio y vienen a impulsar mejoras en la disminución de costes de movilidad, tanto para las empresas como para los particulares.
Tanto es así que las empresas de renting se han percatado de la importancia de aumentar su flota de vehículos propulsados por energías limpias. Los datos manejados por la Asociación Española de Renting de Vehículos (AER) así lo ponen de manifiesto al revelar que el mercado emite ya tres gramos de CO2 menos que el resto del parque de automóviles.
El propio ADN del renting integra un compromiso con la concienciación ambiental, dado que transforma el concepto de propiedad en una nueva modalidad de movilidad como servicio: el pago por uso. A ello habría que añadir otros componentes incluidos en la razón de ser del renting, tales como la flexibilidad y la usabilidad de los vehículos, que cada día están calando más en los conductores y en un mercado que demanda al alza estos servicios.
Otro aspecto resaltable en este contexto es que el renting no compromete a los usuarios a largo plazo, y proporciona una amplia gama de vehículos eficientes propulsados por energías alternativas, ejemplo de la transición hacia una flota electrificada de menos emisiones.
Estos elementos entroncan con los valores de la nueva economía circular en la automoción, alineada con los Objetivos del Desarrollo Sostenible en aras de fomentar el ciclo productivo de los servicios de movilidad. Y no se trata solo de atender a una mera cuestión práctica que conduzca a buscar mejoras en la sostenibilidad del planeta. También hay que dar ejemplo.
La ética empresarial y la apuesta por una cultura corporativa en consonancia con el cambio climático está llevando a las empresas a predicar con el traslado de sus empleados con una flota eficiente, a calcular la reducción de la huella de carbono y a propiciar un consumo responsable desde los centros de trabajo.
En este camino directo hacia la consecución de una movilidad sostenible entran en juego otros actores. El ecosistema de la economía circular debe sumar las voluntades de las empresas y las administraciones públicas, y otras organizaciones relevantes, para encauzar al sector a los nuevos ciclos de vida de los servicios de movilidad. En esta senda deben incluirse también la innovación y las nuevas tecnologías al volante que ya están planteando propuestas de vanguardia en la electromovilidad y que contribuyen al avance de la transición hacia la descarbonización.
Hemos arrancado la ruta. La economía circular en el sector de la movilidad va a ser la palanca que impulse a la movilidad del futuro y ayudará, al mismo tiempo, a la recuperación del mercado. El renting, en este escenario, no es una fórmula fugaz, sino un sector estratégico en los servicios de movilidad que ya empieza a convertirse en un referente para las soluciones del motor de los años venideros.
Sonsoles Martín Garea es directora de Marketing Relacional, Comunicación y RSC de ALD Automotive