La compañía de renting flexible Alquiber ha cerrado el primer semestre de 2025 con un beneficio neto de 3,28 millones de euros, lo que representa un incremento del 7% respecto de los 3,06 millones registrados en el mismo periodo del ejercicio anterior, según ha comunicado la compañía al mercado de valores aecundario BME.
Los ingresos de la empresa se han situado en dicho periodo en 78,23 millones de euros, un 12,4% más que los 69,62 millones alcanzados en el primer semestre de 2024, «impulsados por el crecimiento de la actividad de renting flexible y la evolución positiva de la venta de vehículos de ocasión».
El negocio de alquileres aportó el 86,1% de la facturación total del grupo hasta junio pasado, mientras que la venta de vehículos usados representó el 13,9%.
En cuanto a la rentabilidad operativa de Alquiber, esta también ha mejorado, con un margen de Ebitda del 57,4%, en tanto que el ratio de costes financieros sobre ingresos ha descendido al 7,28%, frente al 7,98% del año anterior.
Crecimiento de flota y refuerzo de inversión
La compañía ha señalado también que su volumen de flota se ha incrementado hasta 21.411 vehículos, un 10,2% más respecto de junio de 2024, un crecimiento acompañado de un Capex de 75,4 millones de euros, destinado principalmente a la adquisición de vehículos industriales de gran tonelaje y unidades transformadas, «bajo un contexto de encarecimiento de precios por parte de los fabricantes».
La deuda financiera neta del grupo, de su lado, ha ascendido a 247,5 millones, equivalente a un ratio de 2,6 veces Ebitda.
El valor de la acción de Alquiber se sitúa en estos momentos en el entorno de 12,40 euros por título, lo que frente a los 10 euros del inicio del ejercicio supone una revalorización del 22%.