La producción de automóviles en Europa continúa por debajo de los niveles previos a la pandemia y se sitúa estructuralmente lejos de las cifras registradas entre 2010 y 2019, cuando las fábricas del continente ensamblaban entre 15,5 y 18,5 millones de vehículos al año, de acuerdo con cifras de la consultora Inovev recopiladas por Fleet People.
En 2024, el volumen de producción de vehículos total apenas superó los 14 millones de unidades, por debajo de los 14,4 millones de 2023 y muy inferior a los máximos históricos alcanzados antes de 2010.
Según el análisis de Inovev, incluso en 2009 —uno de los años más débiles de la serie histórica— se produjeron 14,8 millones de vehículos, mientras que en 2007 se llegó a rozar el umbral de los 19 millones.
Entre 1998 y 2006, la fabricación europea se mantuvo de forma estable en torno a los 18 millones anuales.
Saturación del mercado y cambio en los hábitos de movilidad
El informe apunta que la madurez de los mercados europeos, el cambio de mentalidad entre los consumidores más jóvenes, el auge de la movilidad compartida y el encarecimiento de los vehículos tras la pandemia han limitado su potencial de crecimiento.
Además, la mayor durabilidad de los automóviles y el descenso de las matriculaciones han reducido la necesidad de producción en las plantas europeas, destaca la consultora.
Al respecto, ni siquiera la incorporación de Turquía y Marruecos ha elevado el balance fabril de la Europa de los últimos años, ya que entre 2020 y 2024 el conjunto de Europa y estos dos países han fabricado menos automóviles que en cualquier periodo comprendido entre 1998 y 2019.
Inovev estima, además, que la instalación de nuevas plantas chinas en el continente podría aportar cerca del 2,5% de la producción europea hacia 2030, pero considera «improbable» que el sector recupere los niveles industriales previos a 2010.