La compañía catalana especializada en soluciones de recarga y gestión energética para vehículos eléctricos Wallbox ha superado las 100.000 unidades fabricadas en su factoría de producción de Arlington (Texas), un hito alcanzado menos de dos años después de su apertura.
La instalación, inaugurada a finales de 2022, produce la familia de cargadores Pulsar para el mercado norteamericano y consolida de este modo la capacidad industrial de la compañía en Estados Unidos, uno de sus principales mercados, según ha explicado la propia empresa.
El centro de Arlington dispone de 12.000 metros cuadrados de superficie y forma parte de la estrategia global de Wallbox para reforzar su presencia internacional y «anticiparse al crecimiento sostenido del parque de vehículos eléctricos».
Wallbox ha señalado que la planta de Arlington cuenta con margen para ampliar su capacidad productiva en la medida que aumenten los volúmenes de demanda.
El grupo liderado por el directivo Eric Asunción cotiza en la Bolsa de Nueva York desde 2021 y cuenta con presencia en más de un centenar de países.
Durante el ejercicio pasado, el fabricante español de dispositivos de carga registró unas pérdidas de 131,5 millones de euros, lo que representó un incremento del 17,4% en relación con sus números rojos (112 millones) de 2023.
Wallbox generó en 2024 un volumen de negocio de 163,9 millones a través de la venta de sus dispositivos y software, con un incremento del 14% respecto de los 143,7 millones de euros del ejercicio precedente.