El nuevo monovolumen de Hyundai lleva ya algún tiempo en el mercado (se presentó el pasado verano), pero sigue siendo un modelo novedoso y que llama mucho la atención por las calles. Pasaron los tiempos en que los monovolúmenes se colocaban entre los modelos más vendidos en España, pero las razones de su éxito siguen tan vigentes como entonces.
Hace unos veinte años Hyundai lanzó el H-1, monovolumen de pasajeros diésel derivado de un furgón, y con tracción trasera. Era sólido pero algo tosco y poco refinado.
El Staria en cambio en un vehículo muy moderno, algo que queda patente con solo mirarlo. Sus líneas rectas resultan tan atractivas como sus grupos ópticos, con una línea superior que hace las funciones de iluminación diurna, y los faros propiamente dichos abajo, camuflados en la rejilla.

Esas mismas formas (con 5,25 metros y 1,99 de alto) son las que hacen posible un amplio espacio que se puede pedir para siete o nueve plazas (con acabados Tecno y Style).
En esta última, hay tres plazas delante, y las puertas laterales corredizas facilitan mucho el acceso. Los asientos traseros se pueden desplazar para favorecer a los ocupantes o bien el espacio de carga, de modo que el maletero ofrece entre 831 y 1.303 litros de capacidad.

En cuanto a diseño y calidad interior no tiene nada que envidiar a un turismo e incorpora dos pantallas, una para la instrumentación y otra central de 10,25 pulgadas para manejar el sistema de audio y navegación. También ofrece conectividad para el smartphone con Apple CarPlay y Android Auto.
Respecto a la mecánica hay una sola opción, el motor 2.2 turbo diésel de 177 CV acoplado a un cambio automático de ocho velocidades. No obstante se puede elegir con tracción delantera o total. Su propulsor ofrece un empuje contundente y se puede rodar con desahogo por carretera (velocidad máxima de 185 km/h).
El consumo medio es de 9,3 litros y tampoco hay nada que objetar en cuanto a rumorosidad, ya que apenas se escucha el ruido en el interior.

Como coche familiar es excepcional, y vehículos como este suelen ser los favoritos de los pequeños de la casa. La seguridad está al máximo nivel gracias a las funciones integradas en el sistema SmartSense que incluye de asistencia a la frenada de emergencia, asistente de seguimiento y mantenimiento de carril o asistente anticolisión en el ángulo muerto.
También presume de todas las cualidades necesarias para ser usado en flotas de hoteles o como transporte VIP por carretera (incluyendo asientos eléctricos tipo business calefactados y ventilados).
El principal inconveniente es que al ser diésel no tiene etiqueta Cero (para eléctricos o híbridos enchufables) ni Eco (para híbridos ligeros), lo que limita su uso en entornos urbanos con las crecientes restricciones. Si fuera eléctrico sería un más caro y con poca autonomía, y si fuera híbrido, enchufable o no, también sería más pesado y de gasolina, con mayor consumo.

El Staria nos parece por tanto una gran alternativa, muy práctico, bien concebido y con la gran calidad a que nos tiene acostumbrados Hyundai, que se ve perjudicado por una normativa bastante discutible.
Cuesta 52.700 euros con cinco años de garantía sin límite de kilómetros, y hay una oferta de renting por 716 euros al mes más IVA. Entre sus rivales más duros destacaríamos el Volkswagen Multivan, con motores diésel TDI y también híbrido enchufable (Etiqueta Cero) y el Mercedes Clase V, modelo “Made in Spain” disponible desde hace poco también en versión eléctrica (EQV) con Etiqueta Cero.










