Los principales grupos automovilísticos con presencia en el mercado del viejo continente han cerrado el cupo de nuevas alianzas con fabricantes de vehículos eléctricos con el objetivo de evitar las multas impuestas por la Unión Europea por superar los límites de emisiones de CO₂.
Estas asociaciones, que permiten compartir créditos de emisiones y compensar el exceso de contaminantes registrado en sus gamas de combustión, permitirá a los constructores tradicionales evitar unas sanciones que podrían alcanzar hasta 15.000 millones de euros y que teóricamente se aplicarían sobre sus niveles de emisiones de 2025, si bien la CE ha suavizado el calendario y ha permitido que el cumplimiento se evalúe en promedio durante el periodo 2025-2027.
Todos los acuerdos actuales, gestionados a través de los denominados pool managers, expiran a finales de este ejercicio y deberán renovarse durante los próximos años, según informa Reuters.
Entre ellos destacan los nuevos consorcios que involucran a marcas japonesas, coreanas y europeas con fabricantes eléctricos chinos o estadounidenses.
Mazda, por ejemplo, ha establecido este mes un nuevo acuerdo con Changan Mazda Automobile, su empresa conjunta al 50% con el fabricante chino Changan, al tiempo que mantiene su adhesión al grupo de fabricantes coordinado por Tesla desde comienzos de año.
Nissan, por su parte, ha sellado una alianza con el gigante chino BYD, con el que compartirá créditos de emisiones a partir de 2025. También el grupo surcoreano KG Mobility ha formado un consorcio con el fabricante chino Xpeng, una de las marcas emergentes del mercado eléctrico asiático.
El principal eje de compensación verde
El constructor estadounidense Tesla, de su lado, figura como el principal eje de cooperación de la industria en materia de emisiones, ya que su agrupación ‘antimultas’ incluye a Stellantis, Toyota, Ford, Leapmotor, Mazda y Subaru, y además se ha ampliado desde el pasado mes de marzo con la incorporación de Honda y Suzuki.
Otro de los consorcios destacados está formado por Mercedes-Benz, Volvo Cars, Polestar y Smart Automobile. Estas dos últimas están respaldadas por el grupo chino Geely, cuyo presidente, Li Shufu, posee además una participación del 9,69% en Mercedes-Benz, lo que le convierte en su segundo mayor accionista después del grupo estatal chino BAIC.
Según previsiones de la consultora AlixPartners citadas por Reuters, los automóviles eléctricos representaron el 12% de las ventas de turismos en Europa en 2024 y alcanzarán el 15% este año.
La cuota del mercado eléctrico europeo podría aumentar hasta el 24% en 2027 y situarse en torno al 40% al final de la década, impulsada por las nuevas normativas de emisiones y los incentivos fiscales.








