El fabricante de automóviles chino BYD (Build Your Dreams) se ha enfrentado en los últimos meses a una pérdida de capitalización bursátil superior a 45.000 millones de dólares (41.700 millones de euros al cambio actual) tras una caída de más del 30% en el valor de cada uno de sus títulos desde el máximo histórico alcanzado hace apenas cuatro meses.
En Bolsa, el valor de la acción de BYD marcó al cierre del viernes un precio de 211,20 dólares hongkoneses (24,50 euros), lo que en comparación con los 302,00 dólares (35,10 euros) de comienzos de año representa una variación negativa del 30,1% en lo que va de 2025.
La situación refleja la «creciente preocupación de los inversores por la capacidad de la compañía para mantener su liderazgo en el mayor mercado mundial de vehículos eléctricos», de acuerdo con una información publicada por laa gencia Bloomberg, bajo un contexto actual marcado por la incesante guerra de precios, cada vez más agresiva.
Datos recopilados por Bloomberg muestran que las «recomendaciones de venta» sobre la acción de BYD han alcanzado su nivel más alto desde 2022, «lo que evidencia el deterioro de la confianza del mercado en la estrategia comercial del grupo», detalla Bloomberg.
Según ha señalado Kevin Net, responsable de renta variable asiática en Financière de l’Echiquier, «los inversores mantienen una visión positiva a largo plazo, pero existe una preocupación real por la estrategia de BYD de ganar cuota de mercado a base de presión en los precios en un contexto de involución del sector».
La compañía ha registrado también una caída del 30% en su beneficio neto correspondiente al segundo trimestre, la primera en más de tres años, como consecuencia directa de los descuentos generalizados en el mercado chino.

Protagonista de los descuentos
La propia BYD, que es el líder local chino en ventas de automóviles eléctricos, ha sido, precisamente, uno de los fabricantes que más ha impulsado las sucesivas rondas de rebajas de precios en los últimos ejercicios, ha recordado Bloomberg.
BYD rebajó sus previsiones de ventas de vehículos para este año completo hasta 4,6 millones de unidades, frente a los 5,5 millones inicialmente estimados. Para alcanzar esa cifra, la compañía debería comercializar alrededor de 1,7 millones de vehículos en los últimos cuatro meses del ejercicio, «un reto difícil de cumplir» y bajo nuevas restricciones regulatorias, destaca la agencia de noticias.
Analistas del sector mencionados por Bloomberg han apuntado al respecto que los nuevos lanzamientos previstos para el primer trimestre de 2026 serán «determinantes» para la evolución bursátil del grupo.
BYD ha retrasado la presentación de varios modelos con el fin de hacerlos más competitivos, mientras competidores como Geely o Leapmotor han fortalecido su posicionamiento con recientes incorporaciones al mercado.
A juicio de Xiao Feng, codirector de investigación industrial en China de CLSA Hong Kong, «ningún fabricante puede mantener su ciclo de producto fuerte indefinidamente; ni siquiera BYD». En su opinión, la oferta del fabricante chino se ha visto debilitada tras el dominio ejercido entre 2018 y 2024, con consumidores que se han inclinado hacia «nuevos rostros» como Geely y Leapmotor, explica la agencia.
Pese a los desafíos que enfrenta BYD en el mercado interno, la automovilística está logrando reforzar su presencia internacional, con unas previsiones de ventas en el extranjero de entre 900.000 y un millón de unidades en 2025, por encima de los 800.000 vehículos fijados como meta inicial, según estimaciones de Goldman Sachs.