El fabricante Audi está electrificando la capital alemana con el arranque en el Campus EUREF la unidad de almacenamiento de energía eléctrica más grande de Alemania para el funcionamiento inteligente en red, para promover la transición de energía.
El sistema cuenta con una capacidad de 1,9 MWh, emplea baterías de iones de litio procedentes de vehículos experimentales, para ensayar diversas posibilidades de interacción entre coches eléctricos y la red eléctrica.
La compañía se ha comprometido con la movilidad libre de emisiones, y en 2025, un 40% de los nuevos modelos comercializados contarán con un sistema de propulsión electrificado. A mediados de la próxima década, significará cerca de un millón de coches electrificados al año.
Además, según aumenta el número de modelos eléctricos, también lo hace lo que podemos considerar una gran unidad móvil de almacenamiento de energía. Comporta un enorme potencial, siempre que se haga un uso inteligente de la capacidad de almacenamiento.
La unidad de almacenamiento del Campus EUREF cuenta con un área de 110 metros cuadrados y sirve como laboratorio de pruebas reales para otras aplicaciones. Se encuentra conectada a la red energética de voltaje medio en Berlín con un megavatio de potencia, lo que corresponde al requerimiento promedio de recarga de unos 200 coches eléctricos. Con su capacidad de 1,9 MWh, la unidad de almacenamiento suministra a la totalidad del campus, de 5,5 hectáreas, electricidad para casi dos horas.
Gracias a la gran cuota de energías renovables de los distintos sistemas de generación de electricidad en el área próxima, Berlín ofrece condiciones ideales para el desarrollo de un control inteligente de recarga, que puede ser ampliado para incluir en el futuro un creciente número de coches eléctricos.
Los socios del proyecto buscan realizar un experimento de modelos energéticos con parques eólicos en Brandeburgo-Pomerania Occidental, para mostrar cómo un exceso de electricidad verde puede ser almacenado en el Campus EUREF de forma programada.
Además, los aerogeneradores ya no tendrían que desconectarse de la red en caso de una excesiva producción eléctrica temporal. Sería algo similar a un pequeño bloque de edificios en un mundo sostenible de energía y una aportación al almacenamiento industrial de grandes volúmenes de electricidad sobrante, algo que Audi ha estado practicando desde 2013 en Werlte con su planta conversora de electricidad a gas.