El desarrollador chino de tecnología de conducción autónoma WeRide ha cerrado los nueve primeros meses de 2025 con unos ingresos de 52,1 millones de euros, muy por encima de los 31,3 millones del mismo periodo del ejercicio pasado y un resultado neto negativo de 154,5 millones de euros, inferiores a los 270,6 millones anotados un año antes, según ha comunicado la compañía con sede en Guangzhou y especializada en sistemas de movilidad autónoma para transporte urbano y servicios lanzadera.
En su tercer trimestre, WeRide ha perdido 43,2 millones de euros (146,6 millones de números rojos en el mismo trimestre de 2024) y ha situado su facturación en unos 24 millones de euros, más del doble que hace un año.
Durante este último periodo, el negocio de taxis autónomos aportó 4,9 millones de euros en ingresos a la empresa, lo que supone multiplicar por más de ocho la cifra del año pasado y elevar la penetración de este indicador hasta el 20,7% de la facturación total.
WeRide, que a 31 de octubre gestionaba una flota de 1.600 vehículos autónomos, de los cuales casi 750 se destinan a servicios de taxi autónomo, ha explicado que ya opera en 30 ciudades del mundo.
La empresa cuenta con licencias operativas para trabajar con conducción autónoma en ocho países, lo que extiende su actividad global a China, EEUU, Francia, Bélgica, Arabia Saudí, Singapur, Emiratos Árabes Unidos y, ahora, Suiza.
Suiza dice sí a la conducción autónoma de WeRide
Esta aprobación regulatoria, según ha explicado la marca, incluye los permisos comerciales y de prueba para servicios de taxi autónomo, además de certificaciones específicas para programas urbanos de movilidad automatizada.
El último país en aprobar este sistema para WeTaxi ha sido Suiza, que ha autorizado a la empresa a operar un servicio de taxi autónomo sin conductor en la región de Furttal dentro del programa público iamo, que prevé validaciones técnicas previas antes del inicio de la operación totalmente autónoma en 2026.
WeRide One ha señalado al respecto que se «ha adaptado a los requisitos regulatorios de distintos mercados, incorporando centros de control remoto, herramientas de supervisión de flotas y mecanismos de certificación orientados a garantizar un comportamiento homogéneo de los vehículos en entornos urbanos diversos».
La expansión autónoma e la firma en Suiza también abarca operaciones en Zúrich, donde ya presta servicios con carácter interno para desplazamientos del personal del aeropuerto mediante vehículos dotados de conducción autónoma.
WeRide mantiene a 30 de septiembre una liquidez en caja de 631,6 millones de euros al cambio actual en efectivo. Su deuda bancaria a corto plazo es mínima, de 34,4 millones de euros.










