El grupo Volkswagen, que tiene previsto fabricar un vehículo eléctrico compacto en la planta de Martorell (Barcelona) y un todocamino eléctrico en la planta de Landaben (Navarra) a partir de 2025, tomará la decisión final dependiendo de las condiciones y de los incentivos gubernamentales.
El consorcio alemán, tras la reunión del consejo de supervisión celebrada ayer, ha confirmado que con la electrificación integral de sus plantas europeas pretende generar sinergias adicionales y aprovechar las economías de escala.
En el marco de su estrategia de electrificación ‘Planning Round 70’ para 2025, la sede central del Grupo y el centro de fabricación de Wolfsburg se transformarán y se impulsará la competitividad de la compañía mediante un mayor gasto en tecnologías del futuro.
Las inversiones orientadas a los próximos años se centrarán principalmente en la electromovilidad y la digitalización, que representarán por primera vez el mayor porcentaje de las inversiones totales de 159.000 millones de euros, concretamente un 56% (89.000 millones de euros).
Así, el Grupo Vokswagen invertirá alrededor de 21.000 millones de euros sólo en sus plantas de Baja Sajonia (Alemania), la mayoría de los cuales se invertirán en los centros de fabricación y las instalaciones de componentes.
Además, en la planta de Leipzig (Alemania), se aprovecharán las sinergias de la arquitectura eléctrica para el segmento ‘premium’ con dos modelos de Porsche. De su lado, en la planta de Neckarsulm (Alemania), se ha decidido reequipar la próxima generación de la familia de modelos E6 de Audi.
A partir de 2026, la planta de Bruselas, ya totalmente electrificada, fabricará el nuevo Audi Q8 e-tron. Volkswagen espera que a partir de ese año, uno de cada cuatro vehículos vendidos tenga un sistema de propulsión eléctrica por batería.