El fabricante francés de componentes de automoción Valeo ha advertido de que concentrará en Europa la parte más significativa de sus próximos ajustes operativos si no se introducen «medidas comunitarias» que mitiguen el impacto de los grupos automovilísticas chinos en el mercado.
Según declaraciones de su consejero delegado, Christophe Périllat, recogidas por The Financial Times, la contracción del mercado europeo exige una revisión constante que, en el caso del suministrador galo, se traduce en la clausura de 38 centros entre 2022 y 2025 y la apertura de apenas cuatro ene l mismo periodo.
La industria europea de componentes ha reclamado a la Comisión Europea una revisión de los objetivos que prohíben la venta de vehículos de combustión nuevos en 2035 y la introducción de criterios de contenido producido en Europa para los automóviles comercializados en la región.
De acuerdo con previsiones de Clepa, la asociación europea de proveedores, se estima que podrían desaparecer hasta 350.000 empleos en 2030 si no se produce algún tipo de intervención regulatoria por parte de las autoridades europeas.

Debilidad de la demanda y el impacto industrial
El sector de automoción está registrando reducciones de plantilla significativas precisamente en regiones como Francia y Alemania.
Fabricantes como Michelin, Forvia y Bosch han aplicado amplios recortes estratégicos para adaptarse a la coyuntura actual de un mercado más débil, teniendo en cuenta y como telón de fondo que ya en 2024 los ceses de empleo se duplicaron en relación con ejercicios precedentes.
A esta situación se han sumado incidencias en la cadena de suministro vinculadas a la empresa Nexperia, cuyo control temporal por parte del Gobierno neerlandés ha generado serias restricciones en la cadena y flujo europeo de componentes.
Valeo ha indicado que la situación actual está «en fase de estabilización» y que ha podido asegurar el suministro necesario para mantener la actividad en sus factorías.
La compañía, que está especializada en el montaje de sistemas de iluminación, climatización y cámaras, prevé alcanzar unos ingresos de 20.500 millones de euros cuando termine el ejercicio actual, una cifra que se ubicaría 7.000 millones por debajo de las previsiones incluidas en su plan estratégico efectuadas en 2022.
La empresa prevé aplicar próximamente unos costes de reestructuración adicionales de 100 millones de euros anuales a partir de 2026 que se suman a los 400 millones ya anunciados en 2022 y que se efectúan desde esa fecha.










