El Toyota Yaris es un automóvil que engaña a la vista. Uno se espera encontrar un vehículo pequeño, a simple vista, netamente enfocada a desplazamientos urbanos.
Es decir, y por qué no decirlo, con limitaciones de uso. Esa percepción cambia por completo cuando se conduce, porque goza de una calidad de conducción encomiable y que tiene una capacidad interior sorprendente.
La cuarta generación del Yaris, que solo se comercializa con propulsión híbrida en el mercado de flotas —y en el general, también— está concebida de modo fundamental para un uso urbano, y en ese punto es en el que nos queríamos detener cuando comentábamos su espacio.
Al nuevo Toyota Yaris híbrido con acabado para flotas se puede acceder a través del módulo especializado en renting de la marca, Kinto One, por una cuota de 260 euros mensuales para cubrir 10.000 kilómetros anuales y 48 meses en el que se incluye todo
Las necesidades profesionales de las empresas están cada vez más marcadas por la agenda ecológica, pero existe otro factor que siempre entrará en juego cuando entremezclamos los conceptos de coche, ciudad y trabajo: la capacidad de movilidad que proporciona un automóvil.
El Yaris permite que el profesional se pueda mover por la ciudad libremente, ya que tiene etiqueta ‘Eco’, pero además con la facilidad añadida que aporta el tamaño exterior contenido. Y el tiempo, para una empresa y un empleado que puede acceder, aparcar fácilmente y con menores costes en la almendra de una urbe, vale oro.
Con una propulsión híbrida que utiliza como base un motor de gasolina 1.5, este Yaris puede ahorrar en esta nueva configuración hasta un 20% más de combustible, que se dice pronto, y ofrece un consumo de 3,8 litros por cada cien kilómetros, con unas emisiones de 85 gramos de dióxido de carbono.
Hay que recordar que las duras imposiciones de Bruselas en materia de emisiones para Europa contemplan 95 gramos como promedio, una cifra que reduce sensiblemente este modelo.
Toyota Yaris: Muy bien equipado
El nuevo Yaris cuenta con un aliciente para el canal corporativo, y es que dispone de una configuración especial para flotas denominada Business Plus, como ya es tradición en la marca.
Este acabado ofrece de serie unas llantas comedidas de 15 pulgadas, enfocadas a la reducción del consumo, sensor de lluvia y luz, pantalla táctil de 18 centímetros, Apple CarPlay, mandos en el volante, programador de velocidad, reconocimiento de señales de tráfico y climatizador, entre otros.
A esta serie se suman otras tres — Active Tech, Style y Style Plus—, más dirigidas al cliente privado.
Presente en el mercado desde este mismo mes de septiembre, la cuarta generación de este utilitario contiene una carga estética muy deportiva y ágil y dispone múltiples elementos de seguridad que están disponibles sin sobreprecio en el acabado Business Plus, como airbags frontales, laterales y traseros, asistente de cambio de carril, de arranque en pendiente, control de velocidad adaptativo y de estabilidad y sistema de precolisión con detector para peatón y ciclista.
Al nuevo Toyota Yaris híbrido con acabado para flotas se puede acceder a través del módulo especializado en renting de la marca, Kinto One, por una cuota de 260 euros mensuales para cubrir 10.000 kilómetros anuales y 48 meses en el que se incluye todo, esto es, es un full renting de los más completos que hemos encontrado en el mercado, ya que incluye también sustitución de neumáticos, gestión de multas y vehículo de reemplazo dentro de la cuota, algo que generalmente se abona aparte.
Si se quiere escoger un compromiso que nos permita cubrir más distancia, unos 25.000 kilómetros por año, una cuota para este modelo ronda los 350 euros con todos los servicios incluidos.