Ya rueda por España el nuevo Polestar 4, toda una muestra de lo que la empresa sueca es capaz de hacer. Presume de un diseño realmente vanguardista y limpio, y nos atreveríamos a decir que si Apple hiciera un coche, sería algo parecido a este modelo.
Aunque Polestar comenzó a operar en España en 2022, algunos usuarios aún no la conocen. Tiene su sede en Gotemburgo (Suecia), todos sus coches son eléctricos y de espíritu deportivo y nació bajo el paraguas de Volvo Cars. Esto implica que se aprovechan de muchas sinergias técnicas y, como la marca sueca, pertenece al grupo chino Geely.
Con la llegada del Polestar 4 la gama de la marca está compuesta por tres modelos, todos lógicamente con etiqueta Cero. Está el Polestar 2 lanzado en 2020 (crossover de 4,6 metros), que hasta ahora representa casi todas las ventas de la empresa. Luego llegó el Polestar 3 de 2023 (un SUV grande de 4,9 metros) y ahora se une el nuevo Polestar 4 que nos ocupa.
El nuevo 4 se posiciona entre el 2 y el 3, en cuanto a tamaño y precio.
Respecto del Polestar 3, diríamos que el Polestar 4 es menos SUV, en el sentido de que es más bajo y también hay menos distancia de la carrocería respecto al suelo. Además el Polestar 3 es más largo y bastante más caro, todo un rival eléctrico del Porsche Cayenne a la venta desde 92.900 euros.
Polestar ofrece un renting con un contrato de 60 meses para el Polestar 4 a partir de 696€
Para subrayar la importancia del diseño en Polestar, basta con recordar que su ex consejero delegado es el alemán Thomas Ingenlath, quien comenzó su carrera como diseñador y llegó a vicepresidente de diseño de Volvo Cars.
Un rasgo típico de los modelos eléctricos que vemos en el Polestar 3 es llevar las ruedas en los extremos, con la batería en el centro, con lo que se logra un interior muy amplio.
También es fácil suponer que su aerodinámica se ve favorecida por un morro bajo, la forma de parte posterior o los tiradores de las puertas enrasados y retráctiles. Lo más llamativo es que no lleva luneta trasera, y la imagen que se ve en el espejo central llega a través de una cámara colocada en la parte posterior.
En cuanto a las prestaciones, es realmente rápido. Se vende con dos versiones y ambas comparten la batería de 100 kWh. El de un solo motor y tracción trasera rinde 272 CV y la autonomía llega a los 610 kilómetros.
En la versión con dos motores y 544 CV (de 0 a 100 km/h en solo 3,8 segundos) la autonomía máxima se reduce un poco, hasta los 580 kilómetros.
En un punto de carga rápida (CC de 200 kW) puede pasar de 10% al 80% de carga en solo 30 minutos.
Deportivo, horizontal y muy tecnológico
En el habitáculo del nuevo modelo reina el limpio estilo escandinavo. Los asientos son deportivos, el salpicadero es muy horizontal, dispone de una cuidada iluminación y, como no, lleva en el centro una gran pantalla táctil estilo iPad. El sistema de infoentretenimiento funciona con Android Automotive OS y lleva Google integrado. Así es posible planificar rutas con paradas de recarga o activar dispositivos con comandos de voz.
El hecho de ser eléctrico y no llevar el delante le permite disponer de dos maleteros, uno atrás de 500 litros y otro delantero con 15 litros.
Los sistemas de seguridad son los mismos que usa Volvo. De cara a que el potencial cliente se aventure a disfrutar de un modelo innovador como el Polestar, es clave destacar que el mantenimiento se puede hacer en los puntos de servicio de Volvo Cars.
El Polestar 4 está a la venta desde 65.900 euros para la versión ‘Long Range Single Motor’, y la marca oferta un renting por 696 euros más IVA, a 60 meses y con una aportación inicial de 7.500 euros.