La Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía ha iniciado el proceso de licitación de una flota de vehículos consistente en 759 unidades que utilizará para tareas de medio ambiental, forestal, emergencias y área natural con un valor de contrato de 25,03 millones de euros (30,28 millones de euros con impuestos incluidos).
La entidad dependiente de la Junta de Andalucía ha dividido esta interesante licitación en dos lotes diferentes, el primero de ellos centrado en tareas fundamentales de medioambiente, con una valoración base de 12,87 millones de euros sin IVA, y el segundo, para labores de emergencia, por 12,16 millones de euros.
En este sentido, un total de 397 vehículos serán utilizados para medioambiente y los restantes 362 para emergencias.
En todos los casos, la agencia andaluza adquirirá los vehículos a través de un sistema de renting integral a 48 meses, que incorpore el mantenimiento, servicios y reparación de los vehículos, así como su telemetría en los casos que sea necesario.
Un 18,5% de vehículos ecológicos, cuatro eléctricos
Respecto de la tipología de vehículos seleccionada, serán 126 SUV medianos (103) y grandes (23) con tracción integral e híbridos, 25 con reductora incorporada, 209 pick-ups, 17 furgones con motor diésel y 19 turismos, de los que cuatro serán cien por cien eléctricos, para el área de medioambiente.
Para las tareas de emergencias se han solicitado 124 SUV medianos con tracción integral y motor diésel, 11 SUV grandes híbridos, 18 todoterrenos con reductora, 188 pick-up y 21 furgonetas diésel combi.
En total, 141 unidades sobre el total del pedido, el 18,57% sobre el total de 759 vehículos, tienen características ecológicas y otras 141 sobre el total, también el 18,57%, serán diésel.
En restante cupo de vehículos no se ha identificado una tecnología de motorización específica.
Los vehículos se destinarán a las dependencias operativas de la Agencia de Medio Ambiente y Agua en Sevilla, Almería, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Málaga y Jaén y su enfoque de uso principal se centrará en la restauración de espacios afectados por actividades extractivas, equipamiento e infraestructura, recuperación y gestión de vías pecuarias, apoyo técnico para formación ambiental y obras de protección y conservación para la mejora del medioambiente, entre otros.