La compañía Silence, controlada por el grupo de infraestructuras Acciona, ha anunciado un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) al centenar de trabajadores que acaba de contratar en la antigua planta de Nissan de Barcelona.
La empresa alega que es necesario «ajustar» la producción del microcoche S04 a una demanda por debajo de las expectativas. La medida constituye otro jarro de agua fría sobre la complicada reindustrialización tras el cierre de Nissan, que dejó en la calle a 2.525 empleados.
Fuentes de la empresa han subrayado a Europa Press que la «idea del proyecto no ha cambiado en nada» y han trasladado su confianza en que los niveles de demanda evolucionen al alza pronto, en sus palabras. Entre las acciones que tiene en marcha Silence se encuentra su presencia en el Salón del Automóvil de Ginebra para presentar el nuevo ‘nanocar’ eléctrico que se produce en la Zona Franca de Barcelona.
Silence pretende aplicar el ERTE hasta el 30 de junio por un exceso de stock en los vehículos. Sin embargo, el ERTE no estaba registrado todavía en la autoridad laboral, según confirmaron fuentes de la Conselleria de Empresa y Trabajo de la Generalitat a Europa Press.
Silence recibió la adjudicación directa del Consorci de la Zona Franca y de la mesa de reindustrialización de una extensión de 61.078 metros cuadrados en la antigua planta de la Zona Franca. Fue el primer proyecto que se puso en marcha ya que los de producción de furgonetas eléctricas Zeroid de QEV Technologies y de la pick up eléctrica Ebro siguen a la espera de arrancar tras numerosos problemas.
