Tras las gafas de Santiago Rivas se oculta una de las miradas más certeras y ácidas en este gigantesco imperio del vino y alrededores.
Nariz y paladar, dos herramientas que Santi usa con especial pericia para acercarse a una copa y valorar, sentir y catalogar el néctar de la uva. No es un probador al uso.
Santi se sale del camino marcado y nos habla de un tema tan popular como desconocido, donde a veces reina el tecnicismo y otras el postureo, y todo desde un sentido del humor “di-vino”.
Santi difunde la palabra y el concepto winelover allá en el escenario que le presten para hacernos felices y más sabios. Bajo su marca “Colectivo Decantado” es ya una voz conocida y respetada, que se sorbe en charlas, mesas redondas o incluso en sus rompedores vídeos de Instacatas.
Su estilo lenguaraz y ameno, descarado y punzante, te abre las puertas al universo “vinarra” de una manera como nunca antes lo habías catado. Se acabaron las parrafadas densas, la seriedad con aroma a rancio y se desata la comedia, el entretenimiento y el aprendizaje.
Santiago Rivas, rindiendo cuentas (al vino)
Santi es un experto en vinos y esta pasión proviene de veraneos en Almería donde ya se perdía en vinos naturales del Beaujolais. Años después esa love story está más reforzada que nunca. Escribe artículos en revistas especializadas, da master-classes y abandera salones vinateros, pero no se casa con nadie.
“Hago lo que haga falta por difundir la palabra winelover, pero el contenido debe ser entretenido y real. No rindo cuentas a quien me pague, cuento las cosas como las veo”. Buena forma de llegar al pueblo: desde la sinceridad. ¿Acaso hay mejor manera?
Con todo siempre da la sensación de que cuando se trata de explicar el mundo del vino y sus sensaciones se hace desde la seriedad, vistiendo un traje demasiado formal.
Muy buenos vinos sin consumir
“El mundo del vino y la gente que lo consume es de lo menos encorsetadas que hay. Nuestras fiestas son muy divertidas”, apunta Santi. Y prosigue: “eso es lo que quería hacerle llegar al consumidor civil. No hay nada más social que el vino. Lo que pasa es que los divulgadores están más empeñados en demostrar lo que saben que en enseñar y entretener”. Catad eso.
¿Presente y futuro del vino? Para este catador y explorador vinícola “el mundo del vino está mal, porque se hacen mejores vinos pero, aún, a la gente no le está dando por consumirlos”.
A esto hay que sumarle que hay un receso del consumo de alcohol por lo que el vino “debería posicionarse como una bebida recreativa y gratificante”. Aún con todo Santi ve en Instagram una puerta a un consumo distinto, ya que hoy se puntúa a las personas y no a los vinos.
“Ya no importa el vino como tal si no cómo me haga quedar. Eso es lo que se esconde bajo el hashtag de winelover”.
Es así, amig@s, conocer lo que consumes se sale.
