El fabricante de vehículos francés Renault ha manifestado su disposición a ofrecer su panoplia tecnológica a otros fabricantes de automóviles con el objetivo de aumentar los volúmenes de producción conjuntos y reducir los costes de fabricación en «segmentos de baja rentabilidad» como son los de los automóviles utilitarios y los vehículos comerciales.
Así lo ha asegurado el consejero delegado de la compañía automovilística, el ejecutivo Luca de Meo, durante una comparecencia parlamentaria en Roma.
El directivo ha subrayado que la marca del rombo mantiene su voluntad de colaborar con otros grupos a pesar del reciente intento fallido de cooperación con Volkswagen, centrado en el desarrollo conjunto de una versión eléctrica del modelo Twingo, según la agencia Reuters.
La negociación entre ambas compañías se interrumpió después de unos meses sin que se alcanzaran resultados satisfactorios.
Durante los últimos años, Renault ha desarrollado proyectos en el pasado con marcas como Fiat y Mercedes-Benz, precisamente en el segmento de vehículos pequeños y comerciales.

Bases similares, costes más bajos
Según la intervención de De Meo en el Parlamento italiano, el intercambio de tecnologías relacionadas con plataformas y arquitecturas comunes «puede facilitar la producción de modelos distintos sobre bases similares», con un impacto directo sobre la eficiencia y los márgenes.
El consejero delegado también ha advertido del efecto que las exigencias regulatorias tendrán sobre los costes de fabricación de los constructores de vehículos europeos y ha puntualizado que, entre 2015 y 2030, el coste de producción de un modelo de tamaño medio fabricado por Renault aumentará un 20%, mientras que en el caso de los modelos pequeños el incremento se estima en un 40%.
Estas cifras, ha añadido, «dificultan la rentabilidad de ciertos productos», especialmente en un entorno donde el volumen de ventas «ya no garantiza por sí solo» la sostenibilidad financiera de una gama completa de vehículos a la venta.










