Hay automóviles que no necesitan presentación, y menos en determinados ambientes, como el del universo flotista. El Opel Astra es una de esas referencias, y una de las principales. Es un vehículo que históricamente ha trabajado muy bien en el lado de las empresas.
Desde nuestro punto de vista, la razón fundamental reside en que es un vehículo redondo para el profesional: es funcional, maneja una gran relación de equilibrio entre lo que cuesta y lo que ofrece.
Además es discreto, amplio en su interior y cuenta con un maletero de buenas dimensiones. Para cautivar al complicado gestor de flotas de una empresa, hay que argumentar desde varios frentes.
El nuevo Astra de sexta generación llega al sector corporativo con la siempre difícil tarea de mejorar las cifras de su predecesor, un trabajo que promete conseguir gracias a las nuevas incorporaciones en forma de propulsores —muy— eficientes que ofrece.
Al nuevo Astra se puede acceder en renting desde 382 euros mensuales sin impuestos ni aportación inicial, para un contrato de 48 meses y un ciclo de 30.000 kilómetros anuales con todos los servicios incluidos
El ejercicio pasado, y aun estando en su ciclo final de vida, el Astra fue el tercer modelo más vendido de la marca en Real Fleet, que suma las ventas en renting y compras de empresas. Incluso creció casi un 18% respecto del dato de 2018.
Las expectativas de Opel con esta nueva edición del modelo son, como mínimo, repetir los buenos resultados de años pasados en un mercado de flotas preocupado por las emisiones y por los consumos bajos.
Y es en este punto en el que más ha trabajo la compañía con el nuevo Astra, al que ha dotado de los motores más eficientes de su historia.
Este vehículo aporta ahora cuatro opciones nuevas de gasolina más dos diésel, y hay que decir que las emisiones de dióxido de carbono en el caso de los motores de gasolina parten de 99 gramos y con una media de consumo de 4,4 litros cada cien kilómetros.
Un dato que, atención empresas, se sitúa en 90 gramos y 3,6 litros de combustible por cada cien kilómetros en el caso de las mecánicas de gasóleo.
Cifras que deben ser tenidas muy en cuenta en cualquier car policy corporativa.
Opel Astra, el gran cumplidor
En conjunto, Opel reseña que las cifras de consumo y emisiones del Astra son un 21% inferiores a las del anterior modelo, una variación sustancial que se traduce, en la práctica del trabajador común, en un impresionante dato —permítannos decirlo— de 1.200 kilómetros de autonomía con la versión diésel y 950 kilómetros en el caso de la gasolina.
¿Lo perciben, verdad? No son tantas las marcas que se ponen tanto del lado del cliente profesional.
¿Un punto más? El diseño de este nuevo Astra es continuista. Se podrían haber cambiado varios elementos, pero Opel afirma que a sus clientes corporativos les gusta el Astra tal y como lo que es: un gran rutero sobrio, funcional y de líneas sencillas y elegantes que hace lo que se le pide: cumplir en el trabajo. Para este nuevo modelo le sugerimos también dos elementos adicionales que puede añadir a su cuota mensual.
Lo notará en la conducción, pero muy poco en el precio. A la opción de entrada 1.2 gasolina de 110CV manual se puede acceder por una cuota mensual de 382 euros sin impuestos ni aportación inicial, para un contrato de 48 meses y un ciclo de 30.000 kilómetros anuales con todos los servicios incluidos.
Nosotros les proponemos que sumen a esa cuota de renting la opción ‘Business Plus’ que ofrece la marca en el lanzamiento del Astra y que aporta, por 11 euros más mensuales, con un asiento ergonómico AGR para el conductor (probablemente, los mejores del mercado según nuestro criterio), climatizador digital bizona, asistente de aparcamiento delantero y trasero, volante de tres radios de cuero y reposabrazos delantero.