La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha presentado una campaña para pedir que los dispositivos AdBlue defectuosos sean sustituidos sin coste adicional o, en el caso de haberlos tenido que cambiar anteriormente, se reembolse el importe por los gastos ocasionados, según informa la organización en un comunicado.
El caso, que afecta a los sistemas AdBlue del grupo PSA, en concreto a vehículos de Citroën y Peugeot, ha obligado a cambiar el depósito de muchos coches por «defectos de fábrica», según la OCU, que entiende que estos gastos deben ser asumidos por la marca, ya que sin el sistema el vehículo no puede arrancar y el precio del cambio oscila entre los 800 y los 1.200 euros.
Así, la OCU ha presentando una denuncia ante la Dirección General de Consumo de la Comunidad de Madrid y ha alertado a las autoridades europeas de la red CPC (Cooperación para la Protección del Consumidor) al considerar que el fabricante «ha ocultado información».
El sistema AdBlue consiste en un dispositivo que sirve para reducir las emisiones contaminantes de los motores diésel, y que en el caso de algunos vehículos Citroën adquiridos a partir de 2015 con estos motores estaban presentando problemas por una anomalía en el sistema de anticontaminación.
OCU ha explicado que «identificó» una problemática común debido a las denuncias de los consumidores, que también se ha extendido recientemente a algunos vehículos de Peugeot.
