MotorK, el proveedor de SaaS (software as a service) para la industria de la automoción, contabilizó unas pérdidas netas 23,5 millones de euros en 2021, lo que supone un aumento del 338% en comparación con los 5,3 millones de euros que perdió en el ejercicio precedente.
Según ha señalado la compañía, 2021 fue un año «especialmente difícil» para la industria del automóvil debido a una combinación de vientos en contra y por problemas en la cadena de suministro, incluyendo el continuo impacto negativo en las ventas de automóviles de la actual escasez mundial de chips.
«El 2021 fue un año realmente crucial para MotorK. A pesar de los fuertes vientos en contra de la macroeconomía, cotizamos con éxito en Euronext Amsterdam, logramos un crecimiento récord de los ingresos, duplicamos nuestro equipo y cerramos tres adquisiciones estratégicas», ha explicado el consejero delegado de la compañía, Marco Marlia.
La facturación de MotorK
MotorK facturó 27,56 millones de euros el año pasado, un 42,58% más si se compara con los 19,33 millones de euros que ingresó un año antes, mientras que registró unas pérdidas operativas de 16,37 millones de euros en 2021, un 261% más frente a las pérdidas de 4,53 millones de euros de 2020.
La compañía también ha reiterado su previsión positiva para el año fiscal 2022, al confirmar la guía establecida anteriormente de obtener una cifra de negocios de entre 45 y 47 millones de euros, lo que supondría un crecimiento del 65%, unos ingresos recurrentes anuales de entre 28 y 30 millones de euros y alrededor de un 20% de margen Ebitda ajustado.
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