El fabricante japonés, Mitsubishi, mejora el Outlander PHEV para mantenerse en un mercado que en España (híbridos, eléctricos e híbridos enchufables) representa un 7% del total, una cuota aún pobre, pero crece rápidamente, consecuencia en parte a una brutal caída del diesel, perseguido fiscalmente, y la acción de los gobiernos locales, empeñados en limitar su uso en los entornos urbanos.
En este medio, sólo los eléctricos y los híbridos enchufables (PHEV) con una autonomía eléctrica de más de 40 kilómetros poseen la etiqueta «0 emisiones», la única que permite el libre uso del automóvil en cualquiera de los episodios de alta contaminación y en los espacios restringidos al tráfico rodado.
Y consecuencia de ello es el hecho de que el Mitsubishi Outlander PHEV ha sido el «0 emisiones» más vendido en España durante los últimos 4 años (es el SUV híbrido enchufable más vendido del mundo, con más de 150.000 unidades), ya que su tecnología permite el uso a diario con propulsión eléctrica y el funcionamiento híbrido si se requiere cubrir largas distancias.
El Outlander PHEV, cuya batería se puede cargar en cualquier enchufe, sin que sea necesario un cargador especial, en unas 5 horas, con un coste muy inferior al gasóleo o la gasolina. En homologación WLTP, la más exigente, este híbrido enchufable tiene un consumo combinado de 1,8 litros y unas emisiones de CO2 de 40 gramos por kilómetro. Las emisiones son nulas en conducción cien por cien eléctrica.
Mitsubishi ha firmado en España un acuerdo con Endesa que ofrece a los clientes del Outlander PHEV una Solución Integral de Recarga, que incluye todo el proceso de instalación del punto de carga donde el cliente desee. Esta solución ofrece la posibilidad de que los primeros 100 kWh de carga (unos 540 km en conducción eléctrica), no tengan ningún coste (entre la 1 y las 7 horas).
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El Outlander PHEV dispone de dos motores eléctricos, uno en cada eje, que proporcionan tracción permanente gracias al sistema S-AWC (Super All Wheel Control) de Mitsubishi, que deriva de los coches de competición
Para cumplir con el objetivo de duplicar las ventas de este modelo (1.500 unidades anuales), el Outlander ha sido sometido a un proceso de mejoras, traducidas en un incremento de la capacidad eléctrica (generador, motor eléctrico trasero y batería de tracción), en una velocidad máxima en eléctrico que pasa de 120 km/h a 135 km/h, en un nuevo motor 2.4 de ciclo Atkinson (que sustituye al 2.0), más suave, con más potencia y más par, y en un incremento de la potencia combinada, de los 203 CV a los 230 CV.
Además, la marca configurado una nueva gama y un abanico más amplio de precios, de modo que el Outlander PHEV está disponible desde esta actualizaciones en los acabados Kaiteki y Motion.
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El Kaiteki, ya existente en el modelo anterior, el de equipamiento más completo en la marca, ha sido enriquecida con una nueva tapicería de cuero y una toma de corriente de 1.500 Watios que permite enchufar, por ejemplo, cualquier pequeño electrodoméstico. Esta variante tiene un precio de 50.495 euros, que con los incentivos de la marca y el concesionario se queda en 38.120 euros.
El acabado Motion , de nueva creación para el PHEV, completa la gama por abajo, dotado de un amplio equipamiento del que se han eliminado algunos elementos para alcanzar un precio de acceso a la gama mucho más competitivo, que es de 44.995 euros son descuentos, de modo que con ellos se queda en 33.295 euros.
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