Todas las instituciones que dependen de la Administración Pública federal de México, así como los municipios y los organismos dependientes del Estado Federal iniciarán el proceso para cambiar sus flotas de vehículos con motores de combustión interna hacia un modelo basado en el uso de automóviles híbridos y eléctricos.
Así lo ha aprobado el Pleno de la Cámara de los Diputados del país por unanimidad absoluta, lo que representa, a efectos legales, realizar cambios en la Ley Federal General de Cambio Climático ara introducir esta nueva variante relacionada con la movilidad.
En este sentido, todas las entidades dependientes del Estado Federal deberán aplicar nuevos programas para sustituir de modo paulatino toda su flota de vehículos de combustión por propulsiones limpias.
“Lograr este propósito representa una oportunidad única para transformar nuestra forma de movernos y construir un futuro más limpio, seguro y sostenible. El momento para actuar es ahora”, aseguraba la semana pasada la diputada Adriana Guadalupe Esquinca.
En la actualidad, el parque de vehículos de México consta de unos 47,5 millones de vehículos, de los que 35,4 millones se corresponden con automóviles de turismo, 11,2 millones vehículos industriales dedicados a la carga de mercancías y menos de medio millón relacionados con el transporte público.