El fabricante de automóviles Mercedes-Benz ha impulsado al máximo el perfil tecnológico del nuevo Clase A, su automóvil compacto de referencia, con la idea de incrementar el proceso de conquista de nuevos clientes que inició a comienzos de está década y que ha cambiado por completo el perfil de adquisición de los vehículos de la firma alemana.
En ese propósito también encaja perfectamente la apuesta de la marca de automóviles por el universo corporativo, con un Clase A del que el ejercicio pasado se matricularon 10.753 unidades en España, un 12,5% más que en el año anterior, con una presencia referencial de sus entregas a flotas, canal en el que la automovilística vendió 3.927 unidades del Clase A, con un 36,5% de su volumen anual total.
De hecho, las ventas a flotas del Clase A lideraron la penetración comercial del modelo de Mercedes en 2017, por encima de las ventas a clientes privados —34,5%— y de las entregas a empresas de rent a car —28,1%—.
‘Top ten’ de compactos para flotas
Y también entró el año pasado en la exclusiva lista del ‘top ten’ de automóviles compactos más vendidos a empresas en su vertiente más pura, el ‘Real Fleet’ que computa las compras directas efectuadas por empresas más el renting, con más de 1.500 unidades. Hay que destacar una posición y cifra así teniendo en cuenta la tremenda competitividad del mercado del vehículo corporativo y el tipo de vehículo premium del que estamos hablando.
El Mercedes Clase A es el quinto modelo de la casa en ventas a empresas y renting —por detrás de GLC, C, GLA y Sprinter— y de ahí la gran importancia de este vehículo para la casa.
Tenemos que decir que las impresiones que transmite el nuevo Clase A son muy buenas. La estética engancha desde el primer momento y, una vez que uno se dispone a conducir, la vida resulta sencilla. Las sensaciones que transmite el volante y su comportamiento en carretera es magnífico, sello de la casa.
Pero es el interior donde se juega la gran partida. Especialmente en la interactuación con el modelo.
El pulso tecnológico del Clase A
El nuevo Clase A incorpora el sistema MBUX, que facilita mucho la usabilidad del vehículo en todas las circunstancias y que dispone de una elevada capacidad de personalización. Destacan dos aspectos sobre todas las cosas: el hecho de que se accede por vez primera a una pantalla táctil en la consola central, que lo facilita todo, y el sistema de voz con inteligencia artificial integrada ‘Hey Mercedes’.
Este último sistema define muy bien todo lo que rodea al nuevo Clase A, donde la tecnología lo inunda todo. El sistema ‘Hey Mercedes’ no responde únicamente a preguntas directas, por ejemplo, sino que también atiende las indirectas: si uno tiene frío, lo dice y el sistema le propone subir la calefacción y cuánto lo va a hacer. Esto es, “tengo frío”, en lugar de “Sube la calefacción”. Es así con todo.
Todas las opciones de voz que puede habilitar el coche se efectúan del mismo modo, y todas funcionan mediante conexión de datos. No obstante, si no se dispusiera de conexionen algún momento, las funciones básicas del vehículo siempre estarán activadas. En una situación sin conexión no podremos encontrar el restaurante más cercano, por ejemplo, pero sí elevar la temperatura de la calefacción mediante nuestra voz, a la que ‘Hey Mercedes’ se acostumbra rápido a reconocer, de acuerdo con la marca.
Otro punto muy bueno de ‘Hey Mercedes’ es que analiza y aprende los hábitos del conductor. Si se tienen rutinas diarias de gimnasio, emisora de radio determinada o cualquier actividad en la que interactúa el vehículo, por ejemplo, al introducirnos en el vehículo se efectúa una propuesta inicial de actividad o gestión del vehículo según nuestro perfil. Existe la posibilidad de preconfigurar ocho perfiles para ocho conductores diferentes. Y lo mejor, todo se puede accionar desde el teléfono móvil.
A ‘Hey Mercedes’, que en España está incluido de serie en todos los Clase A, se puede acceder mediante la voz sin problema, aunque las herramientas digitales que se pueden tocar también son muy interesantes. A la altura de la palanca de cambios tradicional de un coche se coloca un ‘touchpad’ táctil que permite dibujar y elegir todo lo que deseamos de la pantalla digital lateral, en tanto que toda la información del cuadro de mandos principal con los relojes frontales se puede accionar con dos interesantes botoncitos táctiles digitales —touch control— dispuestos a la altura de cada dedo pulgar del volante.
La pantalla frontal y lateral básicas del Clase A son de 7,5 pulgadas en ambos casos, mientras que existe la posibilidad, como opcional, de acceder a dos pantallas de 10,25 pulgadas, una opción que, como en todo lo que tiene que ver con elementos tecnológicos, les recomendamos siempre. Las dos pantallas, también de serie, se pueden elegir con tres tipos de ambiente diferente en función de nuestros gustos estéticos y de conducción: clásico, deportivo y discreto.
Tres motores de entrada
La nueva Clase A dispone en su lanzamiento de un motor diésel de 116CV de potencia asociado únicamente a cambio automático de siete velocidades que consume como promedio y según medición de la marca 4,1 litros de combustible por cada cien kilómetros —emisiones de 108 gramos por kilómetro recorrido— y dos de gasolina con 163CV y 224CV de potencia. El primero consume 5,2 litros de media con cambio automático y 5,8 litros en la opción manual y emite 120 g/km y 133 g/km, respectivamente. La opción de 224CV se lanzará en España más adelante sólo con la opción 4MATIC.
Los precios de acceso de los motores son de 31.400 euros para el gasolina de 163CV y 32.700 euros el diésel de 116CV de potencia.
El Clase A, que mide 4,4 metros de largo y cuenta con un maletero con una capacidad de 370 litros, se ofrece en España con dos tipos de equipamiento: ya des el inicial, denominado Progressive, dispone del sistema multimedia MBUX, volante deportivo, sensor de lluvia, cuatro programas de conducción, volante deportivo con touch control, panel táctil, pantallas digitales de 7,5 pulgadas, climatizador, cámara de marcha atrás, llantas de 17 pulgadas y faros led.