La propuesta gastronómica que abre las puertas en URSO hotel & SPA, Media Ración, reúne tradición, producto de calidad y variedad de vinos.
Un restaurante que apuesta por sabores clásicos en platos concebidos para compartir. De la mano de Cuenllas, los mejores productos, la cocina de mercado y las recetas de toda la vida cobran protagonismo en este nuevo espacio. Media Ración recupera las porciones típicas de la restauración madrileña, para compartir y probar distintos platos.
Con un vistazo al apartado de latas para toparse con los mejillones y berberechos, el caviar o las anchoas. La cecina de León, las croquetas, el foie mi-cuit o las tostas (de anguila ahumada, sobrasada o gamba blanca) destacan entre las opciones típicas de barra.
En la sección ‘Verde’, el foco está puesto en la huerta, por ejemplo con alcachofas con almejas de carril y una tradicional menestra de verduras. No faltan platos con el sello Cuenllas: soldaditos de Pavía, arroz cremoso, callos; tampoco pescados y mariscos (raya escabechada, tartar de carabinero), y carnes (ravioli de rabo de toro, manitas de cerdo con anguila ahumada o hamburguesa con queso Comté).
Para terminar, una amplia selección de quesos (que puede degustarse por cuartos, medias o raciones completas) y dulces tan tentadores como chocolate y pan, la tarta de queso o la crema tostada de vainilla.
Para los vinos, Fernando Cuenllas se ha encargado de seleccionar las 80 referencias de una carta diferente y dinámica, con vinos accesibles y sugerentes. El estilo en los dos ambientes del espacio, diferenciados para maximizar la experiencia.
La barra recibe a aquellos que acceden desde el número 15 de la calle Beneficencia con una zona de mesas altas y taburetes. Por otro lado, se aprecian mesas bajas alrededor de dos bancos corridos. En un homenaje a los primeros años de la mantequería, distintos productos típicos de ultramarinos y botellas de vino llenan las estanterías de la pared.
Los suelos de madera clara, las cortinas color arena, las columnas de cristal y la cálida iluminación favorecen que exista continuidad estética entre el restaurante y el hall del hotel, mientras que el cuero negro, las puertas con rejilla de acero y los acabados en acero.