Ktiri (Ok Rent a Car) lidera la revelación y la revolución del rent a car en Baleares. La clave, ofrecer coches de alta gama a precios bajos. Pero hay mucho más.
Reconoce que no le gusta viajar. Es dueño y presidente de Ok Rent a Car, pero prefiere minimizar los desplazamientos, algo difícil operando su negocio en las Islas Baleares.
“Viajo poco con respecto al puesto que ocupo. Prefiero recibir. Cuando me desplazo, tengo que la sensación de no estar trabajando. Donde saco más rendimiento a mi tiempo es en mi despacho”. Othman Ktiri (Casablanca, 1979) no es de seguir las reglas establecidas. Quizá por ello, la compañía que lleva sus iniciales, OK Group, de la que es fundador y presidente ejecutivo, es un negocio que prevé facturar 150 millones de euros este año. Y su filial, OK Rent a Car, se ha convertido en líder en las islas en cuatro años de existencia. Sin seguir caminos marcados.
“Siempre digo: The only way is no way. Es una manera de decir que no creo en los famosos Forecast o Business Plan a cinco años. Personalmente, creo que es imposible saber dónde vas a estar en cinco años”. Azar. Una palabra que este joven empresario menciona varias veces, sobre todo, al hablar de sus inicios en el negocio.
Ingeniero agrónomo de profesión, formado en Francia, su vida cambió delante de un rent a car de Lanzarote. Aunque suene a película de ficción, como él mismo asume.
“Estaba de prácticas, porque la universidad nos obligaba a hacerlas en un país no francófono. Con un amigo, reclamábamos por un coche que nos habían alquilado en muy malas condiciones. Y allí una chica mallorquina que estaba de vacaciones me ayudó con mi castellano, que era muy malo”. Esa chica es hoy su mujer y el motivo por el que Ktiri acabó residiendo en Mallorca. Primero, trabajando para Mercadona y Carrefour. Después, en Renault. Y más tarde, con su propio negocio de compraventa de seminuevos.
“Siempre tuve claro que pondría en marcha un negocio propio, pero jamás que iba a ser de coches”. Dejó un trabajo cómodo y empezó a conocer proveedores y contactó con rent a car y departamentos de remarketing. “En estos casos, la clave es preguntarte si vas a aportar algo nuevo al mercado. Si no, no lo hagas”. Aquel negocio, Logicauto, que sigue operando, creció incluso en los primeros años de la crisis. Pero en 2009, los clientes empezaron a fallar.
“Los rent a car pedían a las marcas que les prolongasen un año las cesiones de los coches. Y éstas, que así retrasaban la recompra, estaban conformes. Era un riesgo, ya que nuestra materia prima se perdía por el camino, y pensé en sacar provecho para crear un rent a car y empezar a fabricar nuestros vehículos usados”.
Y comenzó a comprar coches para cederlos a rent a car, y, después, venderlos en el mercado de segunda mano. Pero algunos clientes volvieron a caer, en algún caso, con los coches ya pedidos y listos para entregar. “En ese momento es cuando dije: si este informal es capaz de alquilar coches, nosotros somos capaces”, afirma.
Siempre digo: The only way is no way. No creo en los Business Plan a cinco años, es imposible saber dónde estarás en ese plazo
El crecimiento según Othman Ktiri
Dicho y hecho. Ktiri creó OK Rent a Car en 2011, centrándose en el alquiler a consumidores y no a empresas. “De cero, lo que nos ha hecho emprender muchísimo, y lo seguimos haciendo. No tenemos un patrón para hacer las cosas, lo cual nos permite ser totalmente imprevisibles”.
Desde el principio, su orientación es alquilar vehículos de alta gama a bajos precios. “Que una empresa sea low cost no quiere decir que vende un producto low cost, sino que tiene un funcionamiento interno de cuidar mucho los costes. En recursos humanos no escatimo en dinero. En todo lo demás, somos una empresa muy cuidadosa con los costes. Los miramos de muy cerca e intentamos usar las máximas sinergias posibles. Soy un obseso de las sinergias”.
Aquel 2011, OK Group facturó cerca de 57 millones. En 2014, la cifra superó los 126 millones. El crecimiento en pocos años ha sido fulgurante. ¿La Ryanair del rent a car? “En diferentes niveles, pero sí, puede haber similitudes. Ellos disponen de la mejor flota, siempre los últimos modelos, los cambian con más frecuencia que nadie y dejan las plazas del avión al precio más barato del mercado. Es bastante parecido a la definición de OK Rent a Car: coches nuevos, muy equipados, y alquilados al mejor precio”.
Ktiri afirma que entrar en un sector tan maduro no fue fácil. “Todo lo nuevo asusta. En el pasado hemos oído mil barbaridades”, relata. “Pero siempre digo que, mientras algunos centran sus esfuerzos en analizarnos, tratar de entender o incluso copiar, nosotros trabajamos. OK Rent a Car ya no es un proyecto, sino una empresa y una marca, ambas muy consolidadas. Este año hemos digerido de manera exitosa un incremento de flota del 40%. Y en lo que queda de año daremos el salto a Barcelona”.
Cómo lo hacen
Esa apertura de Barcelona, explica, no debe interpretarse como el primer salto a una mayor expansión por la península. La encuadra dentro de un proceso lógico, dado que la ciudad condal ha sido emisora y receptora de los coches que Ktiri ha ido comprando y vendiendo todos estos años.
Y es que no ha sido hasta 2015 cuando OK Rent a Car ha terminado de estar presente en todas las islas del archipiélago balear. En la actualidad, poseen una oficina en Ibiza, otra en Formentera, seis en Palma, y dos en Menorca, y un total de 200 empleados en verano y 150 en invierno. Llegado a este punto, cabe preguntarse: ¿Qué flota maneja? “Es secreto”, ríe Ktiri. Y lo explica así: “Nunca he entendido esa transparencia. Cuando dos rent a car se dan la mano, suelen presentarse así: “Yo tengo 1.500” y el otro responde: “Yo, 4.000”. Siempre hemos sido precavidos a la hora de comunicar esta cifra. La considero demasiado estratégica para desvelarla con tanta facilidad”.
No es lo único en lo que se define conservador. Su política financiera está clara: reinversión de beneficios y preservación de fondos propios.
“Tener una situación financiera excelente ayuda a crecer. Un consejo que doy a los jóvenes es que el negocio ideal es el que no necesita financiación para generarlo, sino solo para expandirlo”.
Su política en renovación de flota es bastante más agresiva: el 75% de los coches cambian cada año, lo cual se ha convertido en una de las claves de su éxito. “Cuando llega alguien a alquilar un coche, lo primero que hace es sacarse una foto porque se quedan sorprendidos. Es probable que el coche sea de un segmento superior al que normalmente conduce, y además está nuevo”.
Por eso mismo, descarta probar en el negocio del renting financiero, ya que, según su explicación, “no me apetece que bajo el paraguas de OK Group haya coches de más de dos años. Nuestra imagen de marca no lo permite”, aunque sí tienen una línea de negocio de renting flexible, ya que, al dirigirse a empresas, “nos permite tener clientes durante todo el año y sufrir menos la estacionalidad del alquiler vacacional”.
La imprevisibilidad que mencionaba al principio Ktiri se mezcla con una visión muy clara de lo que tiene que hacer. Dice que influye el hecho de no ser un empresario nacido en este sector, y de haber optado por directivos que nunca hayan trabajado en él.
Eso les da una visión objetiva y con más distancia a la hora de decidir.
“Si OK existe hoy y tiene sentido, éxito comercial y de resultados es porque hemos conseguido encontrar y hacer las cosas de forma diferente en un mercado tan maduro”.
—¿Cree que han transformado el rent a car?
—“Sería muy pretencioso decirlo. Solo hemos trabajado duro y aprovechado al máximo las sinergias. Hemos demostrado que low cost puede rimar con quality”.
Othman Ktiri es el único propietario de OK Group, que además de OK Rent a Car incluye muchas más divisiones relacionadas con el negocio. Un holding a pequeña escala propiedad de un solo nombre.
Y ofertas no han faltado: “Hemos tenido acercamientos, pero la respuesta suele ser la misma: nos lo estamos pasando tan bien… Le damos una visión 100% comercial a un negocio que la mayoría de las empresas tratan desde un punto de vista financiero, lo cual es mucho más divertido. Es una suerte poder hacer cosas diferentes todos los días y disfrutar trabajando creciendo junto con tu equipo”, asegura.
Que se prepare Barcelona. El huracán de OK Group llega ya.
«No me puedo resistir a un buen pescado»Un libro: El viejo y el mar, de Ernest Hemingway. Una canción: ’Take Care’, de Imany. Una película: El Padrino. Un restaurante: Sa Roqueta, en Palma de Mallorca. Una ciudad: Palma Un país: España, porque está entre mis dos países, Francia y Marruecos Una empresa que no sea la suya: Inditex Un coche: El Infiniti Q80. Lo traeremos pronto. Un deporte: El tenis. Suelo jugar de vez en cuando Una comida irresistible: un buen pescado ¿Qué es la familia? Es mi hogar, un sitio en el que intento que no entren las preocupaciones. Es un refugio ¿Algún hobby? La pesca y la gastronomía. Ésta última es lo que más me hace moverme cuando estoy en un sitio |