Las matriculaciones de turismos nuevos en la Unión Europea (UE) cayeron un 23,5%, hasta los 1.091.220 de unidades vendidos en comparación con el mismo periodo de 2017, según la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA). Este descanso se atribuye a la introducción de la nueva prueba WLTP el mes pasado. Esta medida ha causado un aumento excepcional en las inscripciones en agosto con un 31,2% más.
Por este motivo, la mayoría de los países de la UE sufrieron pérdidas de dos dígitos en septiembre, incluidos los cinco mercados principales.
En el acumulado del año, la demanda de automóviles de pasajeros en la Unión Europea se mantuvo con una tendencia positiva, hasta los 11.951.957 unidades entregados, lo que supone un 2,5% más, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Estos datos están en línea con las expectativas de crecimiento para este año.
En los cinco mercados más grandes, la demanda se incrementó en España, con un 11,7%, Francia con un 6,5%, y Alemania con un 2,4%. En el caso contrario, las ventas de automóviles se redujeron en Italia y Reino Unido, con unas caídas del 2,8% y 7,5%, respectivamente.