Las automatriculaciones de automóviles efectuadas por las propias marcas de coches para cumplir con sus objetivos comerciales descendieron un 24,7% en enero pasado y después de totalizar 11.191 unidades, lo que supone una cuota de mercado del 11,1% en relación con los 100.354 automóviles vendidos en nuestro país el mes pasado.
De acuerdo con datos de la consultora especializada en automoción MSI Iberia, la marca con más actividad en este campo de juego en enero fue Peugeot, con un volumen de 1.342 unidades y un retroceso del 17,3%, seguida por Mercedes-Benz, con 1.119 unidades y un descenso del 5,6% y Opel, con 1.088 unidades, un 10,3% menos.
De las principales marcas por volumen de ventas en nuestro país, incrementaron sus automatriculaciones el mes pasado Citroën, con un leve alza del 0,3% y 1.056 unidades, Seat, con 747 unidades, un 11,4% más, Hyundai, que las impulsó un 39%, Mazda (33%) y Mitsubishi (48,3%).
En relación con los modelos más automatriculados, el Peugeot 3008 fue el SUV más actividad tuvo en este apartado, con 355 unidades, en tanto que en turismos fue el Opel Astra, con 334 unidades, el Citroën Berlingo en comerciales ligeros, el Ford Transit en comerciales medios y el Toyota Hilux en pick-up.
El sector de automoción utiliza las automatriculaciones para nutrir sus stocks de vehículos usados propios en su red de concesionarios y para cumplir con sus objetivos comerciales mensuales y anuales.
La cifra de operaciones de este tipo comúnmente aceptada como no lesiva para el interés comercial de un fabricante de vehículos se sitúa en el 10% de sus entregas.