Zapatero a tus zapatos, que dice el bello refranero español. La semana de las flotas de esta edición ha estado protagonizada por el anuncio de Apple, que ha desestimado su incursión en el sector automovilístico; al menos, en lo tocante a la producción de un vehículo en serie propio.
¿Qué podíamos esperar de la marca de la manzana? Lo cierto es que, con su actual poderío, bien podría meterse en el negocio del automóvil, bien en el de cargadores eléctricos para casa, o en el de tostadoras. A esta gente todo le suele salir bien y si han decidido cortar por lo sano, algo no les encaja.
Como todo en la vida es memoria, me acuerdo de Steve Ballmer, el entonces CEO de Microsoft, cuando Steve Jobs lanzó el iPhone al mercado: “Es el teléfono más caro del mundo y no está enfocado en empresas porque no tiene teclado, por lo que no puede usarse para enviar e-mails (…) Nosotros vendemos millones de teléfonos al año y Apple vende cero teléfonos, veremos qué sucede el próximo año”.
Ya saben lo que ocurrió después, así que me reafirmo: si no se meten en el automóvil, no será, seguro porque no pueden.
Me ha parecido muy interesante también la decisión de Luca De Meo, el CEO de Renault, acerca de la creación de una Airbus eléctrica europea. Tengo que confesar que este hombre siempre me ha caído bien, desde los tiempos en los que ya asomaba su talento en Volkswagen, por una sencilla razón: siempre tiene algo inteligente que contar y suele hacerlo con sencillez. Me gusta este estilo. Pues veremos en qué queda la cosa del Airbus eléctrico.
Como aquí se trata de mojarse, ya verán ustedes como no entramos en ello, como suele ocurrirnos con muchas de las cosas importantes que suceden en Europa. A mi, desde luego, si Alemania, Francia e Italia construyen un ‘hub’ eléctrico ‘made in UE, me gustaría que España estuviera in, ¿saben?
Si se producen estas conversaciones, veremos si España considera al vehículo eléctrico, de verdad y de una vez por todas, como un asunto de Estado. O no.
Les resumo algunas informaciones que hemos lanzado durante la semana pasada y que también me han parecido relevantes. La plataforma de carsharing Wible ha generado un Ebitda positivo en España durante el año pasado, o eso ha asegurado la compañía.
Ya saben lo que suelen significar estos términos: que han perdido dinero. Y seguramente —no he visto los libros, eso sí, así que permítanme esta licencia— lo habrán perdido todas las carsharing, ya que este es un negocio bastante ruinoso para las compañías del motor. Es cierto que te aporta exposición y visibilidad de marca, pero eso, al final, se cuantifica poco y de mala manera a través de Marketing en una cuenta de resultados.
También nos hemos hecho eco de la capacitación de fondos por parte de dos eléctricas: una, Powerdot en el ámbito de la infraestructura de recarga, que ha captado cien kilos; la otra, Polestar, que ha cerrado un acuerdo con varios bancos para obtener mil kilos. Se sigue moviendo la cosa, pues, en esto de lo verde.
Les cierro el comentario de la semana con una nueva operación de renting que les avanzábamos en nuestra web: Arval se ocupará del renting de la marca china MG en España, después de haber llegado a un macroacuerdo previo con BYD.
Al respecto les diré que están todas las empresas de renting trabajando como locas en España para conseguir acuerdos con firmas chinas, dado el posicionamiento de mercado que les aguarda en el futuro próximo. La cuota que van a tener está ahí, no será una locura, pero bueno, a nadie le amarga un dulce, y menos si la propuesta de valor es tan sabrosa en términos de precio, ¿no?
Que pasen buena semana.