El fabricante estadounidense de automóviles Ford ha suspendido sus operaciones en Rusia, a través de la ‘joint venture’ que mantiene en el país, denominada Sollers Ford, con motivo de la invasión de Ucrania por parte del ejército ruso, según ha informado la empresa en un comunicado.
«Como parte de la comunidad global, Ford está profundamente preocupada por la invasión de Ucrania y las amenazas resultantes para la paz y la estabilidad. La situación nos ha obligado a reevaluar nuestras operaciones en Rusia», explicó la empresa.
La multinacional del óvalo destacó que en los últimos años ha reducido de forma significativa sus operaciones en Rusia, limitándose en la actualidad a la fabricación de vehículos comerciales y su comercialización a través de una participación minoritaria en la ‘joint venture’.
Ford, con Ucrania
«Dada la situación, hoy informamos a nuestros socios de la ‘joint venture’ de que suspenderemos nuestras operaciones en Rusia, con efecto inmediato, hasta nuevo aviso», subrayaron desde la compañía con sede en Dearborn (Michigan).
Por otro lado, la firma indicó que no cuenta con «operaciones significativas» en Ucrania, aunque sí mantiene en plantilla un elevado número de ciudadanos de dicho país, a los que seguirá apoyando. Además, Ford Fund donará 100.000 dólares (90.000 euros) al fondo de ayuda humanitaria Global Giving Ucrania.