El fabricante de automóviles eléctricos estadounidense Fisker ha anunciado que ha conseguido captar 150 millones de dólares a través de uno de sus accionistas y que esta cantidad será utilizada en cuatro tramos temporales para continuar con la actividad de la empresa.
De igual modo, la compañía ha aseverado que continúa en conversaciones con un fabricante de automóviles, del que prosigue sin facilitar el nombre, “para una posible operación de desarrollo de plataformas de vehículos eléctricos con fabricación en Estados Unidos”.
Fisker, que ha comercializado en lo que llevamos de ejercicio un total de 1.300 automóviles, ha tenido que salir al paso en los últimos tiempos de las informaciones que apuntaban a que sus recursos de liquidez se están agotando.
Sobre la operación con un “gran fabricante de automóviles”, la empresa ha asegurado que “podría incluir una inversión en Fisker”. El acuerdo potencial incluiría “el desarrollo conjunto de una o más plataformas de vehículos eléctricos y la fabricación en Norteamérica”.
Hasta el pasado 15 de marzo, Fisker ha fabricado mil vehículos y ha vendido 1.300, según ha indicado, si bien cuenta con un stock actual de 4.700 automóviles, teniendo en cuenta los modelos ensamblados y no comercializados de 2023 y de lo que llevamos de 2024.
De esta cantidad, 1.168 están ubicados en puertos secos de Norteamérica, según ha podido averiguar esta publicación, 2.140 en almacenes ‘stockados’, y 171 producidos pero no vendidos. En el caso de Europa, la marca cuenta con 131 unidades en puertos secos, y unos 734 almacenados.
Fisker ha puntualizado que este inventario sin dueño aún está valorado en más de 200 millones de dólares.
Casi 1.300 millones de pérdidas en dos años
De acuerdo con una presentación a inversores efectuada por la empresa, que ha podido ser vista por esta publicación y que contiene información suplementaria a la de prensa, Fisker contaría a 15 de marzo con 89,1 millones de dólares en caja y de libre disposición. Al finalizar diciembre del año pasado, la empresa tenía obligaciones de pago por 182 millones de dólares.
A partir de esta semana, la empresa ha decidido detener su cadencia productiva durante las próximas seis semanas, con el propósito de alinear los pedidos con sus existencias.
Fisker registró una facturación de casi 273 millones de dólares en 2023, de acuerdo con sus últimas cuentas presentadas, con unas abultadas pérdidas de 761,9 millones de dólares que se suman a los 547,5 millones de dólares de números rojos del ejercicio anterior.