El fabricante de automóviles Fiat quiere incentivar la entrada de su primer coche sin emisiones en el mercado profesional, el Fiat 500 eléctrico, con una estrategia basada en la financiación que posibilitará acceder a este vehículo a partir de una cuota mensual de algo más de cien euros.
Así lo ha indicado la compañía de automóviles durante la presentación de su vehículo más emblemático, que acaba de recibir un propulsor eléctrico que permite que un conductor recorra entre un máximo de 185 kilómetros o 320 kilómetros en modo de cero emisiones y en función de la versión del modelo que se elija.
El Fiat 500 eléctrico es un utilitario fantástico para rodar por ciudad, con el ingrediente añadido de eliminar el factor ruido y circular de un modo más relajado. Hemos conducido este vehículo por la almendra de una urbe grande como Madrid y la experiencia resulta, sobre todo, placentera.
El Fiat 500 eléctrico, en medio de la ‘jungla’ de Madrid, en plena Gran vía. FOTOGRAFÍA: FLEET PEOPLE
Este coche no es un vehículo comercial, desde luego, que nos sirva como herramienta de trabajo en el centro de la ciudad. Está pensado para otro tipo de público. Urbanita, de cualquier edad y, más que posiblemente, un profesional liberal “harto” de buscar aparcamiento en el centro y, sobre todo, con clase. Con mucha clase.
El 500 atrae miradas. Si se dan cuenta, su diseño, aunque haya variado lógicamente con el tiempo, es el mismo coche, por así decirlo. Aun así, a poco que le apliquemos un color sugerente, capta la atención. Siempre ha sido así, y más en las ciudades con tendencia a la congestión, donde se mueve con una soltura que nos ha gustado mucho. Y pensamos que, independientemente de la estética, este último punto es uno de los que logra generar atención. En el campo de batalla asfáltico, se se ve muy maniobrable y dinámico.
Autonomía del Fiat 500 eléctrico
Con dos tipos de propulsiones eléctricas de 185 y 320 kilómetros de autonomía, el 500 se puede utilizar sin necesidad de recarga por periodos que ofrecen tranquilidad al usuario, con intervalos de tres días, por ejemplo, o más. La marca explica que la gran mayoría de conductores de coches eléctricos no realiza más de 50 kilómetros diarios, y este es un dato que hay que tener en cuenta.
Con una toma de corriente eléctrica doméstica de 2,3kW, el coche se carga en unas nueve horas, y si se opta por una wallbox de entre 3,7 a 7,4kW se pueden llegar a cuatro horas o incluso menos.
Los modos de conducción del Fiat 500 eléctrico están pensados también para facilitar la recarga eléctrica del vehículo cuando circulamos. La opción ‘normal’ no ofrece ninguna sorpresa, pero si accionamos la opción ‘range’, cada vez que frenemos el coche o deceleremos, el vehículo aplicará una retención extra que busca regenerar poco a poco la batería del coche. Cuesta un poco acostumbrarse, pero parece una solución efectiva.
La opción ‘sherpa’, además, elimina muchos servicios superfluos a la conducción por si nos encontramos en una situación de poca autonomía del vehículo. Limita la velocidad, la carga del móvil, el climatizador… todo para aumentar al máximo la autonomía.
Y un detalle más. ‘Turtle’ o tortuga. Se activa cuando quedan 24 kilómetros de autonomía. Elimina, esta vez sí, todos los elementos que no sean fundamentales para conducir con el fin de que alcancemos con éxito un puesto de recarga.
Multimedia y conducción del 500 eléctrico
Pero volvamos a la alegría de conducir este 500. El habitáculo es más grande para el conductor y su acompañante, y detrás se ofrecen dos plazas más. No demasiado grandes, pero prácticas y con un acceso curioso y relativamente sencillo en la versión ‘3+1’. En relación con los elementos de configuración, el 500 eléctrico no lleva dispositivo multimedia en sí mismo, sino que utiliza nuestro teléfono móvil como gestor multimedia.
El acceso a las plazas traseras en la versión ‘3+1’ es efectivo.
Se coloca en el ‘dock’ central y a través de el —de nuestro móvil— el vehículo activa el navegador o el sistema de música. Por cierto, cuando arrancamos el coche y durante cuatro segundos, el 500 emite la melodía del bello filme Amarcord de Fellini, compuesta por Nino Rotta. De entrada, transmite paz. Nos gusta mucho este detalle.
De serie, el Fiat 500 eléctrico, que no utiliza caja de cambios (es automática con accionamiento de teclas), dispone de tirador de puerta electrónico y botón de apertura anterior, también electrónico. La entrada al coche no necesita llave y ofrece un sistema de iluminación con full-leds totales, cargador inalámbrico y freno de mano también electrónico.
A este vehículo se puede acceder desde una cuota mensual inicial de 109 euros para la versión de entrada, denominada ‘Action’, de 149 euros mensuales para la versión intermedia ‘Passion’ y de 199 euros para el modelo ‘Icon’, que cuenta con el equipamiento más completo.
En todos los casos se requiere una entrada inicial y final, en el caso del ‘Action’ de 4.954 euros de entrada más otra cuota final de 10.707 euros, con 48 mensualidades.