Endesa X Way, la filial de movilidad eléctrica de Endesa, ha desplegado más de 400 puntos de recarga ultrarrápidos en 125 ubicaciones de España desde finales de 2021, con potencias de entre 150 kW y 350 kW, que actualmente es la mayor velocidad de carga para los vehículos, según ha informado la compañía.
En esta línea, Endesa X Way ha manifestado su intención de que los puntos de recarga ultrarrápidos alcancen los 600 a finales de este año, que hasta la fecha están repartidos en 12 de las 17 comunidades autónomas españolas y en más de la mitad de las provincias.
De los más de 400 puntos de recarga de alta potencia de Endesa X Way, un 50% se encuentran en entornos de carreteras.
Hasta la fecha, la red de Endesa X Way cuenta con cerca de 5.000 puntos de recarga por toda la geografía española, en concreto, el 40% de los cargadores están en corriente continúa, es decir, es una red de carga rápida o ultrarrápida, frente a una media del parque de puntos de recarga instalados en España de entre el 15 y 20%.
Todas las provincias de nuestro país cuentan con infraestructura de recarga de acceso público de Endesa X Way y con este despliegue ya se da servicio a casi el 60% de la población en su entorno más próximo.
La directora general de Endesa X Way, Elena Bernárdez, ha destacado que el acceso a este tipo de infraestructura es fundamental para poder tomar la decisión por parte de los potenciales usuarios de pasarse a la movilidad eléctrica.
Asimismo, Bernárdez ha pedido una mayor agilidad en los trámites administrativos para avanzar más rápido y hacer más fácil la transición hacia una movilidad más sostenible.
En este sentido, de los 400 cargadores ultrarrápidos instalados, 6 de cada 10 aún no pueden utilizarse al estar pendientes de recibir todas las autorizaciones pertinentes por parte de las distintas administraciones para poder ser puestos en marcha.
Aunque la preparación del proyecto y la instalación de cargadores de alta potencia requiera de algo más de tiempo, Endesa X Way ha explicado que está logrando tener lista la instalación en muchos casos en apenas 4 o 5 meses. El resto de los trámites administrativos hace, sin embargo, que en un gran número de casos haya que esperar hasta 24 meses para que puedan usarse por parte de los conductores.